VALÈNCIA (EFE). El Banco de España ha calculado que extender el periodo de cómputo para la jubilación de 25 a 35 años supondría un recorte de la pensión inicial media del 8,2 %, de acuerdo con el documento ocasional sobre pensiones publicado este miércoles por la entidad.
Según el informe, la ampliación progresiva del período de cálculo desde 15 hasta 25 años (un año cada año desde 2013) ya ha supuesto una caída de la pensión inicial media del 5 %.
No obstante, simultanear la ampliación del período de cálculo a 35 años con el descarte de los años más desfavorables para determinar la base reguladora permitiría suavizar la caída de la pensión inicial media o incluso mejorarla.
La utilización de entre los 25 y los 28 años más favorables, dentro de los 35 previos a la jubilación, arrojaría una pensión inicial media mayor, mientras que si se computasen entre los 30 y los 34 años más favorables la pensión inicial media sería menor.
El punto neutro estaría en tomar en consideración los 29 años más favorables, porque arrojaría una pensión media similar a la resultante de tomar en cuenta los 25 años anteriores a la jubilación.
Sin embargo, un esquema que permitiese descartar solo los 12 peores meses de cotización entre los 35 años previos a la jubilación supondría una pensión media inicial un 6,5 % más baja.
En general, la posibilidad de descartar los años más desfavorables beneficiaría a los trabajadores afectados por lagunas de cotización o períodos de desempleo, así como a las pensiones por debajo de la media, de modo que la desigualdad en la cuantía de las nuevas prestaciones sería ligeramente inferior.