VALÈNCIA. "La playa lo es todo para mí, por eso me voy a dejar la piel en buscar una solución más sostenible, duradera y satisfactoria que revierta la situación de regresión que estamos padeciendo". Estas fueron las declaraciones del alcalde de Canet d'en Berenguer, Pere Antoni, al dar a conocer el proyecto de regeneración de la playa previsto por el ministerio.
Una intervención con la que despejó las dudas de algunos de los concejales de la corporación sobre la iniciativa de Costas para la playa de Canet, por la que preguntaron al presidente de la corporación. Pere Antoni explicó que la actuación anunciada por Costas está pendiente de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) a lo que añadió que "de momento, se desconocen el plazo de ejecución".
Para reivindicar la puesta en marcha de este proyecto y una pronta intervención que mejore el estado del litoral, que Antoni calificó de "urgente", el alcalde recordó que se ha acordado asistir el primer viernes de cada mes frente a la demarcación de Costas de Valencia. Una medida que secundará tanto el Ayuntamiento de Canet como el Ayuntamiento de Sagunt, tal y como han confirmado ambos alcaldes, además de distintas asociaciones vecinales. "En este tema, Sagunto y Canet, vamos de la mano".
Respecto a la intervención del ministerio, que consistirá en una "actuación de refulado", es decir, un trasvase de un millón de metros cúbicos de arena desde Cullera, cuyo coste asciende a los casi 17 millones de euros, el alcalde insistió en que "no es la solución", ya que será una "medida provisional que no podrán fin a la regresión, al no garantizar la retención de sedimentos, que es el origen del problema de nuestras playas. Tampoco son alternativas las barreras artificiales perpendiculares a la costa, con las que se alteran las corrientes marinas", añadió.
Ante esta opción, el Consistorio ya presentó alegaciones para retener arena, como posible solución para regenerar la playa de Canet, atendiendo a un estudio realizado por IH Cantabria, un grupo multidisciplinar de ingeniería y de gestión de la costa que estudia el comportamiento de esta y su evolución frente a las principales amenazas naturales y antrópicas para proponer mecanismos de protección y gestión sostenible de las zonas costeras.
Frente al la propuesta del ministerio, Canet aboga por proyectos "más sostenibles, de ingeniería verde, que propongan la fijación de sedimentos y sean respetuosos con el ecosistema marino". De ahí que el ayuntamiento ya lleve meses trabajando en una iniciativa que cuenta con la colaboración de la Universitat Politècnica de València, la empresa privada , ONGs y distintas administraciones.