Cuando trabajas mucho, estás en un puesto directivo y en tu empresa debes pagar las nóminas de 900 personas, la presión es evidente. Cuando tu compañía crece exponencialmente tras un trabajo de 20 años, las endorfinas llegan solas. Pero para digerirlo todo, seguir avanzando y cuidar a tus empleados, debes alejarte al menos algún tiempo de tu lugar de trabajo.

Es lo que hace Eugenio de Miguel, director de Recursos Humanos en Aquaservice, el lugar que está haciendo cambiar los hábitos de consumo de agua de los españoles.

Ha localizado dos franjas en las que poder dar rienda suelta a su necesidad de poner velocidad en las piernas. Entre las seis y las ocho de la mañana, cuando casi todo el mundo duerme, o justo después de comer, en un momento de asueto para otros que él ventila en cinco minutos para aprovechar el resto quemando asfalto con sus zapatillas.