VALÈNCIA. El Ayuntamiento de Aldaia ha salido al paso de las acusaciones realizadas por Acció Ecologista-Agró, que ha solicitado la nulidad de la aprobación provisional del plan parcial del parque comarcal de innovación 'Pont dels Cavalls'. Mientras la entidad ecologista denuncia "graves irregularidades" en el procedimiento y una "falta de transparencia", el consistorio asegura a Valencia Plaza que el proyecto ha cumplido con todos los trámites legales desde que se reactivó en el año 2017, calificando los argumentos versados por la agrupación de "infundados y oportunistas".
Acció Ecologista-Agró sostiene que el proceso de tramitación del proyecto ha estado marcado por "reiterados incumplimientos del procedimiento", señalando casi una veintena de infracciones: entre ellas, destaca la ausencia de publicación en el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) de la Declaración Ambiental y Territorial Estratégica, así como del anuncio de información pública del plan. Asimismo, la entidad ecologista denuncia la falta de acceso a documentación clave y la "insuficiencia" de los informes relativos al riesgo de inundación en la zona afectada por la Dana.
Sin embargo, desde el ayuntamiento, niegan estas afirmaciones: "Todas las fases del proyecto se han realizado conforme a la normativa vigente. Los periodos de exposición pública se han cumplido y la documentación solicitada ha sido entregada". Respecto a la proyección del parque comarcal en una zona con riesgo de inundaciones, fuentes municipales consultadas por este diario argumentan que las cartografías oficiales de la Generalitat Valenciana no avalan las reclamaciones de la agrupación ecologista. "La zona no es inundable, según los mapas del Patricova y del SNCZI. Además, cualquier propuesta de mejora para este plan será incorporada conforme a la ley", añaden.
Otra de las críticas principales de Acció Ecologista-Agró es que el Ayuntamiento de Aldaia estaría "instrumentalizando" los daños de la Dana para justificar la aprobación del proyecto, al que consideran un "megaplan urbanístico". Según la entidad, la construcción del parque empresarial agravará el riesgo de inundación en el municipio, al "sellar un suelo natural claramente afectado por la Dana" y denuncia que no se han cumplido los condicionantes establecidos en la Declaración Ambiental.
En respuesta, el consistorio ha calificado estas declaraciones como un intento de "torpedear un proyecto que ya contaba con la oposición ecologista antes del temporal". Además, las fuentes municipales de Aldaia defienden el plan como una herramienta clave para la recuperación económica del municipio, así como del área metropolitana de València, tras el devastador episodio climático. "La Dana arrasó nuestro tejido económico. Este proyecto es una ventana de oportunidades para generar empleo, atraer inversión y reactivar la economía local en un municipio muy castigado", señalan desde el ayuntamiento.
Desde el consistorio, insisten a este diario en que la aprobación provisional estaba prevista antes de la Dana y que el parque empresarial generará un impacto positivo tanto en el comercio como en la industria auxiliar. Las fuentes municipales aseguran que, más allá de la construcción del parque, el proyecto dinamizará a empresas locales relacionadas con la logística, el transporte y los servicios asociados a grandes cooperativas como Consum, consolidando a Aldaia como un nodo estratégico en la comarca de l'Horta Sud.
El plan parcial de 'Pont dels Cavalls' contempla el desarrollo de un parque comarcal, con un 51% de su superficie destinada a actividades de componente innovador. Según el Ayuntamiento de Aldaia, este porcentaje cumple con los requisitos establecidos por la Generalitat Valenciana para su ejecución.
Además, aseguran que el proyecto incluye medidas preventivas de seguridad medioambiental -como sistemas de drenaje sostenible, zonas verdes de filtración y una balsa de laminación para retener el agua en episodios de lluvias intensas-, al mismo tiempo que se comprometen a considerar mejoras adicionales.
Por su parte, Acció Ecologista-Agró cuestiona la viabilidad de estas medidas y pone en duda la sostenibilidad del proyecto, indicando que no se han cumplido varios requisitos de la Declaración Ambiental, como los relativos a la conservación del patrimonio y la valoración del impacto ambiental. Sin embargo, el Ayuntamiento de Aldaia subraya que el plan cuenta con un largo recorrido: fue iniciado en 2005 y retomado doce años después, en 2017, bajo el gobierno del Botànic.
Desde entonces, ha superado todas las fases necesarias para llegar a la aprobación provisional. "Decir que nos hemos saltado pasos es mentir de forma deliberada. Cada fase ha sido avalada por la Conselleria de Medio Ambiente y ajustada a la normativa", insisten desde el consistorio.