En Castellón hay una riqueza inmensa, y todavía estamos por descubrirlo. Dentro de la comarca de la Plana Alta, una agrupación de municipios se ha propuesto poner en valor sus virtudes, y así es como Plana de l'Arc se ha convertido en una nueva marca turística. Toma su nombre del arco romano del siglo II que se encuentra en mitad del territorio. Una planicie que no supera los 300 metros de altura, aunque tiene vistas al macizo de Peñagolosa, y está envuelta de cadenas montañosas, que a su vez protegen la zona de las inclemencias meteorológicas Así es como crece el olivo, el almendro y la vid. Y se potencia el paisaje, la tradición y la gastronomía.
Los siete municipios que componen el conglomerado son Cabanes de l'Arc -en cuyas afueras se encuentra el citado monumento romano- Villafamés, Benlloc, La Vall d'Alba, La Torre d'en Doménec, Coves de Vinromà, y Vilanova d'Alcolea. Cada cual con sus propios puntos de interés, sus costumbres y sus festividades. En conjunto, una franja al Norte de Castellón de la Plana, capital de provincia, de la que todavía desconocemos casi todo y que a partir de ahora puede sorprendernos con su modelo y su eminente apuesta por el turismo slow. No interesa tanto sacar partido al sol y playa, sino a la montaña y el arraigo. Al trabajo artesano, el producto de calidad y el respeto por el entorno, en pueblos que llevan toda una vida practicándolo.
Hagamos el viaje muncipio a municipio. Descubramos que hay más allá del arco.
Siete destinos inmensos
- Cabanes de l'Arc. La belleza de los vestigos romanos en mitad de la vasta planicie nos hace viajar en el tiempo. L'Arc de Cabanes pertenece al Tesoro Artístico Nacional y está envuelto de leyendas: cuentan que se construyó en una sola noche bajo la luz de la Luna y los moradores de estas tierras lo encontraron alzado al día siguiente, sin saber nada más acerca de su origen. Cierto o no, el caso es que Cabanes presume de otros atractivos patrimoniales: el portal de Sitjar, el horno gótico, el torreón vigía... Dos momentos buenos para visitar el municipio son junio, cuando se celebran las fiestas de Sant Pere y hay una romería hasta la playa de Torre la Sal, y noviembre, cuando la Feria de Sant Andreu reúne a más de de 200 expositores agroalimentarios, conciertos, showcookings y talleres, mientras se muestra el trabajo de los productores de Castelló Ruta de Sabor.º
Así que... slow
Hay mucho por descubrir, así que mejor si lo hacemos despacio. La firma Plana de l'Arc surge como marca turística, pero entendiendo que atraer gente hacia los municipios desconocidos es, en realidad, una cuestión de responsabilidad con el entorno natural, patrimonial y humano. Se trata de poner en valor la singularidad de estos municipios, para que perduren en el tiempo, pero sin llegar a alterar la esencia que tienen. De esto va el slow tourism, que propone viajar con tranquilidad, disfrutando del destino elegido, y por tanto integrándose en sus costumbres. Los siete municipios de los que hablamos constituyen parte de la riqueza de la Comunitat y hacen de la provincia de Castellón un enclave atractivo para cualquier visitante. Hasta la fecha, no nos habíamos dado cuenta, pero ya va siendo hora de fijarnos en lo nuestro. El nuevo turismo va de eso: de una mirada renovada sobre lo que siempre ha estado ahí. Toda la vida.