Planes para una Semana Santa valenciana

Llegará el día en el que podamos retomar los viajes, aunque sea nacionales, con seguridad. Ese día en el que salir de donde vivimos, no sea una gymkana de certificados y Pcr negativas. Por el momento, seguimos 'encerrados', con cierre perimetral y toque de queda. Pero lejos de lamentarnos (que también), hay que recordar que la del año pasado sí que fue atípica y tenemos que hacernos fuertes ante una situación adversa. ¿Cómo? Aprovechando para redescubrir lo que tenemos más cerca.

Porque aunque nos pueda parecer poco exótica, -por vivir en ella, entendednos-, la Comunitat Valenciana todavía tiene muchísimo por descubrir y quizás sean estos días de vacaciones, la mejor ocasión para hacerlo.

Por ejemplo, en Gandía están empezando a instalar una noria que será la sensación de la Semana Santa. Sí, una noria. Y oye, que subirse a la noria -desmontable- más alta de Europa no es moco de pavo. Será en el Grao de Gandía y se podrá disfrutar de la vista panorámica desde 65 metros de altura. Si bajamos al suelo, es buen momento de volver a visitar un símbolo de la historia valenciana, el Palau Ducal de Gandía, estandarte del poderío de los Borgia -o Borja- y un palacio sin igual del gótico valenciano. Los días 2, 3, 4, 10 y 11 de abril realizarán visitas guiadas para conocer todos los secretos que se esconden tras sus muros.

No muy lejos de allí, tienes dos lugares donde reservar y ponerte las botas. Uno es Casa Sanchis La Tulipa con bien de tradición valenciana en sus platos, donde hacerte la picaeta perfecta a base de cocas de dacsa con gamba amb bleda, sang am seba, sepionets, montaditos de figatell o el puchero de los domingos. El otro, Vins i Mes. En alguna ocasión te hemos hablado del templo del vino que tiene Rubén Moreno y esta es la ocasión perfecta para celebrar que han vuelto a abrir sus puertas.

Si seguimos en Alicante, quizás es buen momento para apostar por la naturaleza pura y dura. El aroma a jazmín ya flota en el ambiente y la primavera ha empezado a cubrir todo de flores. ¿Sabías que en Pedreguer se encuentra un oasis de jardinería mediterránea? Y no te estamos enviando a comprar plantas, sino a conocer un lugar de lo más singular, el Jardín de L'Albarda. Más de 50.000 m2 y 700 especie de plantas de la terreta y palmeras. Es el proyecto de Enrique Montoliu, que allá por 1990 empezó a gestar lo que hoy puedes visitar. Y no solamente hay plantas y árboles, sino que en el camino te toparás con fuentes, templetes, pérgolas... Todo un deleite para los sentidos que abre todos los días entre las 10:00 y las 14:00 horas.

Igual todavía no hace tiempo de bañarse, o quizás sí para los más atrevidos. En Callosa d'en Sarrià está uno de los parajes naturales más bonitos de toda la Comunitat Valenciana. Les Fonts d'Algar puede presumir de tener aguas puras y cristalinas, saltos de agua y cascadas y un sinuoso paisaje que el agua ha ido modelando a su paso. Solo visitarlas ya vale la pena, pero si encima te bañas en esa maravilla, lo recordarás para siempre. Muy cerca de allí está un planazo para niños -y mayores-, el Dino Park. ¿A quién no le fascina el mundo de los dinosaurios? Y ¿terminar el día con una visita a Polop de la Marina? Presentando nuestros respetos en Ca L'Angels, a beber vinos naturales, comer minchos fritos, negra de la bahía o una pierna de cabritillo confitada. ¿Para qué más?

Y si hablamos del mar, tenemos hasta islas. Unas se pueden descubrir bajo el mar, como las Columbretes en Castellón, donde casi a diario se organizan excursiones de buceo y snorkel y en otras, se puede pasar el día, como es el caso de la isla de Tabarca, que desde Santa Pola, se conecta con varias frecuencias diarias de barcos de ida y vuelta. Historias de piratas berberiscos, murallas, un faro, posidonia y calderos tabarquinos a base de arroz y pescados, en la única isla habitada de la Comunitat Valenciana.

Si lo que te va cuando viajas, son la historia y el patrimonio cultural, Guadalest puede ser otra de tus paradas en esta Semana Santa valenciana. Es uno de los pueblos más bonitos de España, encaramado sobre lo alto y conserva parte del Castillo de San José, importante bastión, desde época musulmana hasta la moderna. Para castillos que visitar, el de Peníscola y la historia del Papa Luna, el más célebre habitante del mismo o el la doble fortaleza de Xàtiva que por fin el 1 de abril reabre sus puertas.