VALÈNCIA. La salida del vicepresidente segundo del Consell, Rubén Martínez Dalmau, ha dejado en Podem una imagen difícil de explicar durante los últimos días que, a marchas forzadas, ha terminado en el anuncio oficial de que será relevado en el cargo por la persona que llevaba sonando desde el principio: Héctor Illueca.
La cronología de lo ocurrido evidencia lo rotas que se encuentran las relaciones en el seno del partido entre dos de sus dirigentes más relevantes: su máximo representante en el Gobierno autonómico y la líder de la formación en la Comunitat Valenciana, Pilar Lima. Fue el pasado viernes cuando el primero comunicó que se marchaba tras constantes pulsos con la segunda. El último, el nombramiento pendiente en la secretaría autonómica de Justicia, el segundo puesto más importante que los morados ostentan dentro del Consell y sobre el cual existían discrepancias respecto a quién debía ocuparlo.
Dalmau comunicó la decisión a su equipo, al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y finalmente al partido. El fin de semana no sirvió para reconducir la situación –negociar un nombre–, de manera que la determinación se tornó en irrevocable. Y así pasaron tres días en los que la reacción del partido a la crisis desatada fue el silencio.
La única comunicación oficial llegó este lunes y consistió en una nota de prensa en la que se daba por enterado de la intención de Dalmau 72 horas después de que se conociera ("se ha tratado la petición de ser relevado", señalaban). En ella, no aclaraba nada más al respecto pese a la incertidumbre y el vacío de poder real en el Consell que el paso del tiempo con este escenario desencadena para la formación. Y, por supuesto, no ofrecía ningún tipo de explicación de lo ocurrido ni se planteaba una comparecencia ante los medios.
Ante ese mutismo ("se comunicarán las siguientes cuestiones cuando proceda", indicaron fuentes oficiales), fue el todavía conseller de Vivienda quien habló, pocas horas después, este martes. Lo hizo para asegurar que su marcha era firme y que había propuesto a Héctor Illueca –actual director de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social del Gobierno central– para sustituirle. Unas palabras que llaman la atención puesto que Pilar Lima ha evitado pronunciarse acerca del asunto hasta el momento.
Si hacer mención a la crisis interna, Dalmau afirmó ante los medios que se va "con los deberes hechos" y que "ahora mismo que todo está en marcha" en la Conselleria de Vivienda que lidera "no pasa nada" por que vuelva a la Universidad y le sustituya una persona "tan capacitada" como Illueca. Igualmente, aseguró que no se va "decepcionado" de la política, a la que llegó hace tres años para ser el candidato de consenso de Unides Podem a la presidencia de la Generalitat, y que siempre se ha sentido con el "apoyo necesario" del partido, el cual lo compone "la gente que lo forma y no los órganos que lo dirigen".
Preguntado por sus diferencias con Lima, únicamente comentó que las relaciones en la formación "pueden tener sus altibajos en un momento dado" y que las "cuitas" se han de quedar dentro de los partidos. También se mostró convencido de que su equipo de trabajo seguirá en sus puestos cuando se oficialice el relevo, algo que dudan multitud de cargos morados ante el vaticinio de una nueva purga por parte de la dirección.
Dalmau salió así a hablar, acaparó el anuncio ya previsible de Illueca como sustituto y, sólo después, el partido reaccionó, aunque ni siquiera de forma oficial y tampoco por boca de su líder autonómica. Fuentes de la formación confirmaron que el director de la Inspección de Trabajo será la propuesta que se lleve a los órganos internos para ser aprobada. Los plazos no se saben. Afín a Lima y al sector de Pablo Iglesias, su entrada en el Consell no replicará la autonomía con la que trabajaba Dalmau. Y quedará por ver de qué manera le acompaña la siguiente fase de depuración del resto de cargos del Gobierno autonómico que no sean de la cuerda de la cúpula.
Desde Madrid trasladaron este martes que la gestión del relevo ha sido coordinada por Podem, del que ha partido la propuesta, y el partido a nivel estatal. Concretamente, con su secretaria general, Ione Belarra, que, añadieron, tiene como prioridad en esta nueva etapa "apoyar a los territorios en sus debates y tomas de decisión más importantes".
