FOTO: EUROPA PRESSLa caída en En Comú y la crisis de Madrid pasan factura a la coalición, que logra salvar los muebles en la Comunidad Valenciana
VALÈNCIA. (EP). Unidas Podemos y sus confluencias han pasado de ser la tercera a la cuarta fuerza de ámbito nacional tras las elecciones de este domingo, en las que han logrado 42 escaños, 25 menos que en la anterior legislatura. Sin embargo, pese a caer en votos, porcentaje y escaños, podría ser determinante para que el socialista Pedro Sánchez forme gobierno si Ciudadanos cumple su promesa de no pactar con el PSOE. Sus 42 escaños serían imprescindibles si el líder socialista optase por explorar la creación de un gobierno de izquierdas apoyado por formaciones nacionalistas o independentistas.
Con el 99 por ciento escrutado, la coalición formada por Podemos, Izquierda Unida y Equo, ha perdido aproximadamente 1,38 millones de votos, sumando 3,70 millones de sufragios (el 14,31%). Hace tres años les votaron 5,08 millones de electores (el 21,15%) y se hicieron con 67 asientos en el Palacio de la Carrera de San Jerónimo.
Además de la subida general del PSOE en toda España, la candidatura liderada por Pablo Iglesias se ha visto especialmente
perjudicada por sus caídas en Euskadi, Cataluña, Baleares y la Comunidad Valenciana, Navarra y Galicia y se ha quedado sin diputados por Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura y La Rioja.
El mayor descenso lo ha sufrido en el País Vasco, donde había sido la lista más votada hace tres años. Ahora ha descendido hasta la tercera plaza, por detrás del PNV y el PSE-EE y tiene a Bildu pisándole los talones a tan sólo 20.000 votos. En concreto, ha pasado de 6 a 4 diputados, al perder unos 112.000 votos, y 12 puntos porcentuales, quedándose con un apoyo del 17,56%.
Su confluencia catalana, En Comú Podem, que fue la candidatura más votada en Cataluña tanto en 2015 como en 2016, se ha desplomado hasta la tercera plaza, por detrás de ERC y el PSC, quedándose con 7 escaños, cinco menos de los que sumó en la anteriores generales. En concreto, se ha dejado en el camino unos 240.000 votos y su porcentaje de apoyos ha caído 10 puntos hasta el 14,89%.
En Baleares, Unidas Podemos fue la primera fuerza en 2016, pero ahora se han quedado en la segunda posición, tras caer ocho puntos en porcentaje de votos, perdiendo 26.000 apoyos, pero logrando retener sus dos diputados por las islas.
Unidas Podemos también ha perdido apoyos en la Comunidad Valenciana, concretamente 285.000 sufragios y 11 puntos en porcentaje. En 2016, cuando Podemos y Esquerra Unida (EUPV) se aliaron con Compromís, fueron la segunda candidatura más apoyos, mientras que ahora son la cuarta. Eso sí, Compromís es la que ha salido peor parada de la ruptura de la coalición.
En 2016 la marca 'A la Valenciana' sumó nueve escaños (cinco de Unidos Podemos y cuatro de Compromís) y ahora los de Mónica Oltra se han quedado en uno, mientras que los de Pablo Iglesias han conseguido revalidar sus cinco asientos en Madrid.
En Navarra tenía dos diputados y se ha quedado con una, tras pasar de segunda a tercera fuerza al perder 27.000 apoyos, diez puntos menos del porcentaje de logró en 2016.
En Galicia, esta vez Podemos ha concurrido en alianza con Esquerda Unida, Equo, bajo la denominación de En Común Galicia. La salida de la coalición de Anova (que esta vez no se ha presentado) y de las denominadas Mareas (que han competido en solitario) se ha traducido en la pérdida de 134.566 votos y tres diputados.
Ahora la coalición gallega de Podemos tendrá dos representantes en el grupo confederal gracias a los 212.976 votos (14,15%) que ha logrado reunir en la comunidad gallega, en la que el PSOE ha conquistado la primera plaza.
A Unidas Podemos también parece haberle pasado factura la crisis de Podemos en la Comunidad de Madrid. Tras la decisión de Íñigo Errejón de aliarse con la alcaldesa, Manuela Carmena, y concurrir a las autonómicas del 26 de mayo bajo las siglas de Más Madrid, Unidas Podemos se ha convertido en la cuarta fuerza madrileña cuando en 2106 fue la segunda, por delante del PSOE.
Así, los de Pablo Iglesias se han quedado en 607.599 votos, 130.000 menos que hace tres años y su porcentaje de apoyo ha pasado del 21,29% al 16,25%. En esta nueva legislatura tendrán 8 diputados por Madrid, dos menos que en la anterior y han sumado 90.000 votos más que Vox, que se ha hecho con cinco asientos por esta circunscripción.
En Andalucía, Unidas Podemos ha cosechado 155.000 votos menos que hace tres años, lo que le ha hecho perder dos diputados --ahora tendrá 9-- y pasar de tercera a cuarta fuerza, igual que en Aragón, donde el retroceso ha sido de 6 puntos porcentuales, 27.000 sufragios y un diputado, el de su secretario de Organización, Pablo Echenique, cabeza de lista por Zaragoza.
La única comunidad en la que los de Pablo Iglesias han subido en la relación de fuerzas es en Canarias, pero no por méritos propios, sino por el descalabro del PP, que ha quedado en la tercera posición. Unidas Podemos mantiene sus tres escaños por el archipiélago, pese a a haberse dejado 34.000 votos y cinco puntos porcentuales.
En Asturias, han revalidado la tercera plaza pero con un diputado, 35.000 votos y 6 puntos menos de apoyo y en Murcia cae de la tercera a la quinta posición, perdiendo 22.000 votos (4 puntos), pero manteniendo su único representante.
