VALÈNCIA (EP). El portavoz de Hacienda del PP en Les Corts, Rubén Ibáñez, ha afirmado que el 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, "cierra 2022 con casi 6.000 millones de euros de ruina para la Comunitat Valenciana", en alusión al nivel de deuda pública y de déficit.
Según los datos difundidos este jueves y viernes por el Ministerio de Hacienda y el Banco de España, el déficit de la Comunitat al cierre de 2022 asciende a 3.847 millones de euros, lo que supone el 3,11% del PIB regional, mientras la deuda se sitúa en 55.032 millones de euros.
"De 2021 a 2022 el déficit en la Comunitat ha aumentado 2.729 millones de euros, el equivalente al 2,11% del PIB regional. Es evidente que con Puig el déficit de la Comunitat está fuera de control", ha denunciado el 'popular' en un comunicado, advirtiendo que "la Comunitat Valenciana lidera el ranking de todas las CCAA en déficit tanto en términos absolutos como relativos".
En cuanto a la deuda, ha criticado que "solo en este año ha aumentado 1.983 millones de euros, ya que en el primer trimestre se situaba en 53.049 millones de euros": "Es un descalabro en toda regla".
"Desde que Puig es 'president' de la Generalitat, la deuda de la Comunitat ha aumentado 15.000 millones de euros. Puig es el presidente de la deuda, el déficit y la ruina para la Comunitat Valenciana", ha abundado, para sostener que "el socialismo es lo peor que ha pasado a esta Comunitat" y que "Puig y Sánchez representan la verdadera hipoteca que todos los ciudadanos seguirán pagando".
También ha acusado a Puig de ser "el presidente de los impagos": "No paga a entidades sociales, profesores o sanitarios y limita toda su actividad a los anuncios y a ofrecer 'ximobonos' en el tiempo de descuento para tratar de salvarse" "Lo cierto --ha advertido-- es que los anuncios de Puig son una herencia envenenada para los jóvenes y los mayores, que con su dinero se van a pagar los anuncios que hace el todavía hoy 'president'".
"Puig se limita a hacer campaña electoral con absoluta desesperación electoral. Trata de combatir con el dinero de todos las malas expectativas electorales del PSPV, cuando la realidad es que de nada sirve reconocer derechos si no se pagan. El gobierno de Puig ha priorizado los despachos a las necesidades de los valencianos".