La presidenta del Colegio de Médicos de Valencia, absuelta
de una denuncia por agresión

VALÈNCIA. La presidenta del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Valencia (ICOMV), Mercedes Hurtado, ha sido absuelta de la denuncia interpuesta contra ella por agresión, según ha informado este jueves el ICOMV en un comunicado.

En concreto, la denuncia se interpuso en septiembre del año pasado por parte de un facultativo del departamento de oftalmología del Hospital La Fe por un presunto delito de lesiones por agresión. A partir de dicha acusación, el juzgado acordó abrir un procedimiento de juicio por delitos leves y solicitó al Instituto de Medicina Legal que emitiese un informe sobre el parte de Urgencias presentado por el denunciante.

Ante esto, el ICOMV explica que el Magistrado ha adelantado este jueves verbalmente el fallo absolutorio, justo al finalizar el juicio y de forma extraordinaria, puesto que la vía normal es esperar a la redacción por escrito de la sentencia.

Así pues, el Colegio detalla que el Magistrado ha comunicado a las partes que la Dra. Hurtado era absuelta del delito que se le atribuía, de forma inmediata, por no existir prueba alguna que la incriminara. Y ello, "a pesar de que el denunciante decía que había cuatro testigos presenciales de los hechos, los cuales han declarado en el acto de juicio negando haber presenciado agresión alguna".

Mercedes Hurtado, defendida por el abogado Juan Molpeceres, ha alegado que sufre por parte del denunciante "una situación de acoso laboral desde hace nueve años". Dicha situación ha sido comunicada ya al servicio pertinente de la Conselleria, que está investigándolo. Asimismo, la defensa de la doctora "está convencida de que esta denuncia, frustrada de plano con la absolución, es un instrumento más de la estrategia del denunciante para perjudicar a la presidenta del Colegio de Médicos y a la institución que representa", según afirma en el comunicado.

Denunció un manotazo

Los hechos recogidos en la denuncia se remontan al 3 de julio de 2023 y, se inician con una "revisión de una urgencia" que solicitó una médico interno residente (MIR) de guardia y recayó en la consulta de la doctora Hurtado en el reparto de cargas de trabajo. Según el escrito, Hurtado -jefa de sección- se presentó pasados unos minutos en la consulta del denunciante J.F. M.C., también jefe de sección, requiriéndole para que la revisión la hiciese la MIR.

Sin embargo, el doctor J.F. M.C.-siempre según su relato- señaló que estaba a su cargo, y que no podía realizarla. La doctora se marchó y volvió con la historia clínica del paciente, ordenando a la joven médico que hiciese la revisión, a lo que el denunciante señaló que no iba a hacer su trabajo. Hurtado volvió a marcharse, regresó y, según el denunciante, cogió a la MIR "de manera violenta" del brazo, a lo que el doctor le espetó que cesara con su actitud. 

El denunciante afirmó que la doctora Hurtado, "de manera sorpresiva procedió a golpear con su mano abierta" en su antebrazo, lo que le causó hematomas. Añadió que había cuatro testigos de los hechos pero, según el comunicado del Colegio de Médicos, ninguno ratificó su versión en el juicio.