Foto: EVA MÁÑEZLa Asociación de Derecho Sanitario de la Comunidad Valenciana lleva tiempo denunciando la lamentable situación a la que tienen que hacer frente día a día los profesionales sanitarios en sus puestos de trabajo. Si bien es cierto que en muchas ocasiones hemos hablado de facultativos, también lo es que el personal de enfermería se enfrenta a un volumen de trabajo prácticamente inasumible.
Un reciente estudio publicado por el sindicato de Enfermería Satse revela otro dato desolador: un profesional de enfermería que trabaje en un centro de Primaria tiene una media en nuestro país de 1.900 pacientes, cuando la media debería ser de unos 1.100, es decir, 800 pacientes de más, es decir, un 42% más de lo que sería recomendable.
El estudio también hace un análisis por comunidades autónomas, y revela que la Comunidad Valenciana es una de las peor paradas, con una media de 1.866 pacientes por profesional.
Esta situación tiene, a mi juicio, tres gravísimas consecuencias. La primera, las secuelas psicológicas que puede padecer el personal de enfermería como consecuencia de trabajar bajo semejante presión y nivel de estrés. La segunda, el deficiente servicio que se está ofreciendo a los pacientes.
Y la tercera, el preocupante aumento del número de agresiones al personal en este caso de enfermería, que además es el colectivo que más tiempo comparte con los pacientes y el que suele dar la cara en las situaciones en las que acompañantes y familiares acaban perdiendo los nervios. En concreto, y según datos facilitados por la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública durante la celebración del II Congreso de Derecho Sanitario de la Comunidad Valenciana, el riesgo de sufrir una agresión en Atención Primaria es 2'3 veces superior al de Atención Especializada.
Desde la ADSCV seguiremos poniendo el foco en este problema que sufren todos los días las personas que se hacen cargo de nosotros en nuestros momentos más vulnerables, cuando estamos enfermos. Asimismo, seguiremos instando a las Administraciones a que pongan los medios necesarios para regular turnos, salarios, acceso a recursos, a personal y a infraestructuras para garantizar a los profesionales de enfermería y resto de personal sanitario unas condiciones dignas para desarrollar su trabajo.
Carlos Fornes es presidente de la Asociación de Derecho Sanitario de la Comunidad Valenciana
