El PSPV defiende sus enmiendas a la Ley de Cambio Climático mientras Compromís y UP piden "lealtad"

VALÈNCIA (EP). El PSPV ha justificado las enmiendas que ha presentado en solitario a la Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica de la Generalitat, mientras sus socios de gobierno (Compromís y UP) han pedido a los socialistas que sean "fieles, honestos y leales" con lo acordado en el seno del gobierno del Botànic.

Así han valorado representantes de los tres grupos parlamentarios, a preguntas de los periodistas en Les Corts, las enmiendas presentadas por el PSPV para reducir el impacto fiscal de esta ley en sectores como la cerámica.

Como síndica socialista, Ana Barceló ha defendido que las enmiendas "diferenciadas" se deben al contexto actual de inflación y a la necesidad de que la cerámica pague nuevos impuestos cuando ya lo hace por emitir gases contaminantes: "Sería una doble imposición".

A esto ha sumado que el sector necesita más años de transición para adaptarse al hidrógeno 'verde', a pesar de que la ley prevé que los impuestos no se apliquen hasta 2025, y que "la cerámica es de los sectores más comprometidos" con el cambio climático.

Además, Barceló ha hecho hincapié en que la norma "no pretende ser impositiva" y en que "en todos los sectores hay una conciencia elevadísima" para contribuir a mitigar la emergencia climática

Papi Robles (Compromís) ha dado por hecho que el PSPV será "fiel y honesto" a la propuesta "ya acordada por el gobierno" y ha sostenido que las enmiendas deben ser "coherentes" para que las industrias que más contaminen paguen más impuestos, con el objetivo de disponer de un "cajón de dinero" para facilitar la reconversión de los sectores.

Dicho esto, ha remarcado que ve factible llegar a un acuerdo con el grupo socialista, algo que ha ligado con los ocho años de gobierno del Botànic, y que "el reto es que la industria cerámica de Castellón no cierre".

"Lealtad a lo firmado"

De UP, Pilar Lima ha advertido que el pacto del tripartito incluye la fiscalidad medioambiental que "ahora urge más que nunca", en este caso en una ley que "está tardando demasiado". "Los compromisos están para cumplirlos con lealtad. Debemos lealtad a lo firmado, no a un socio", ha rematado.

Entre la oposición, la síndica del PP, Mª José Catalá, ha tendido la mano al PSPV para negociar las enmiendas y ha asegurado que ve a los socialistas dispuestos a "dulcificar y aminorar" la carga impositiva que incluye la nueva ley.

Así, pese a que el grupo 'popular' ha presentado una enmienda a la totalidad que será rechazada este jueves, ha destacado que han planteado 150 enmiendas parciales a la normativa: "Un grupo que plantea 150 enmiendas está dispuesto a negociar".

Ruth Merino (Cs) ha asegurado que en su grupo no están "en contra de todo lo que huela a Agenda 2030", por lo que atenderán el debate de la enmienda a la totalidad "desde la sensatez y la moderación" para decantar su voto, y Ana Vega (Vox) se ha mostrado en contra de este "suicidio climático" y de crear nuevos impuestos.