VALÈNCIA. Después de la tormenta llega la calma. Tanto Compromís y PSPV han insistido en su voluntad de formar un gobierno progresista tras las primeras desavenencias entra ambas fuerzas. La líder del PSPV, Sandra Gómez, se había negado a asistir al encuentro en la ronda institucional emprendida por el alcalde en funciones, Joan Ribó, al considerar que merecían un trato "de igual a igual" con la coalición valencianista y por delante de otros partidos de la oposición. Así ha sucedido, y la socialista no ha acudido a la entrevista con Ribó. Sin embargo, más tarde uno y otro han insistido: la intención es alcanzar un acuerdo de gobierno.
Los socialistas han emitido un comunicado en el que han emplazado al líder de Compromís a una reunión la próxima semana con el objetivo de "dar pasos en la negociación y decidir el programa de Gobierno para los próximos cuatro años". Insiste el partido del puño y la rosa en que "la ciudadanía espera que nos sentemos a hablar desde la serenidad y la vocación de entendimiento" para dar "respuesta a los retos que tiene ante sí València".
A las 10.30, como estaba previsto, Ribó ha mantenido un encuentro con la portavoz del Partido Popular, María José Català, en la que se han tratado asuntos como el desarrollo del primer pleno municipal y otras cuestiones de organización. Además, la popular ha dejado claro que no apoyará al líder de la coalición para que sea alcalde y, a la salida, ha reivindicado, como ha venido haciendo los últimos días, una alternativa a un gobierno liderado por Compromís.
Sobre el desencuentro con el PSPV, Ribó ha explicado que se ha tratado de un malentendido: "Nunca nos hemos planteado una reunión para formar gobierno y parece que no se ha entendido bien". Además, el alcalde en funciones ha querido quitar hierro al asunto diciendo que "ha sido un error de interpretación", pero que "no pasa nada".
Más tarde, el PSPV ha emitido su comunicado en el que aseveraba que "la ciudadanía de València exige responsabilidad a Compromís para llegar a un acuerdo entre los partidos progresistas" y que la formación de Sandra Gómez "va a seguir trabajando para lograrlo".
Sin embargo, sí han lamentado que "la primera foto de Joan Ribó tras las elecciones haya sido con el Partido Popular tras anular la reunión con los socialistas”. “Esto supone una decepción para todos los votantes progresistas de la ciudad de València”, han señalado, porque “el mandato de la ciudadanía tras el 26 de mayo ha sido que las formaciones progresistas tenemos que trabajar de manera conjunta”.
Con todo, han insistido en que "el proyecto del ayuntamiento tiene que ser común, progresista y con un liderazgo compartido", por lo que han emplazado a Compromís a un encuentro a principios de la próxima semana.