VALÈNCIA (EFE). El president del Gobierno valenciano, Ximo Puig, ha afirmado este miércoles la decisión de la Generalitat de Cataluña de llevar al Ejecutivo central a los tribunales para reclamar el pago de los adelantos de financiación pendientes de 2019 que no sabe si la vía judicial es "la vía correcta".
"Cada Gobierno puede entenderlo de una manera o de otra", ha afirmado Puig durante una visita al Espai Sanitari Campanar-Ernest Lluch de València junto a la ministra de Sanidad en funciones, María Luisa Carcedo, sobre el anuncio del Gobierno catalán y la invitación de este a que otras comunidades se sumen.
Puig ha recordado que el Gobierno valenciano intentó en un momento determinado plantear un litigio de carácter judicial respecto a la financiación autonómica, al entender que estaban "asistidos por la razón" en tanto que "cualquier informe objetivo" señala que la Comunitat Valenciana es "la peor financiada".
No obstante, ha considerado que hay que "ir al fondo de la cuestión", que es que debe haber un Gobierno que tenga "competencias y capacidad para poder sustentar lo que es una financiación justa, y para eso pues es bastante importante que haya un Gobierno, no un Gobierno en funciones".
El president ha afirmado que "ojalá hubiera una vía" para que estas liquidaciones a cuenta se puedan producir y ha recordado que hubo voluntad por parte de la ministra de Hacienda de que fuera así, pero "parece ser que la Abogacía del Estado no lo permite".
"En cualquier caso, más allá de la confrontación, nosotros estamos por el diálogo y por la solución más que hacer partidismo o hacer confrontación de todo lo que tiene que ver con la financiación", ha manifestado.
Preguntado sobre si el Gobierno valenciano aplicará recortes, Puig ha asegurado que ningún ajuste va a afectar al Estado del bienestar y todo lo que es el sistema de atención a la dependencia, a la sanidad y a la educación.
Ha admitido que se está trabajando desde el punto de vista técnico para intentar buscar solución a un problema, el de que España no tiene Presupuestos gracias a la "extraña alianza entre las derechas y los independentistas" en las Cortes Generales, frente a lo cual hay que tomar decisiones y actuar con responsabilidad.
Puig ha negado que esté previsto en estos momentos un plan de ajuste y ha precisado que "se está hablando simplemente de ver si hay partidas determinadas en las que se puede trasladar el gasto al próximo año".
El president ha defendido que los Presupuestos del Estado que no se pudieron aprobar eran los mejores de la última década para los valencianos, y ha alertado de que si no hay cuentas públicas las autonomías tienen menos recursos, si bien con los "escasos" recursos de que disponen darán prioridad a las cuestiones fundamentales.
"Esto no es una decisión del Gobierno valenciano ni del Gobierno de España", ha aseverado Puig, quien ha lamentado que ahora además hay también "intereses bastante determinantes para que no haya Gobierno" y ha alertado: "Que no haya Presupuestos y que no haya Gobierno tiene consecuencias para los ciudadanos".
Por su parte, la ministra de Sanidad ha señalado al ser preguntada cuándo se pagará a las autonomías el Fondo de Garantía Asistencial (FOGA) que comparte las afirmaciones de Puig, pues se está trabajando sin Presupuestos y es necesario un "nuevo Gobierno que funcione de manera más firme" y tenga capacidad de actuar.
