VALENCIA (EP). El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, apuesta por "recuperar los puentes" entre el Gobierno y la Generalitat de Cataluña, a quienes pide "cambiar de actitud" para propiciar el diálogo sin "confrontación cortoplacista para ganar votos" y considera que "hay un camino que se debería explorar, que es volver a empezar desde el Estatuto".
Así se ha pronunciado Puig en una entrevista concedida a Europa Press en relación a la situación política en Cataluña, el iniciado proceso de "desconexión" con España y el debate generado en torno a la posible convocatoria de un Referéndum Unilateral de Independencia (RUI).
El presidente valenciano ha asegurado que al Consell le "preocupa mucho" Cataluña por la relación comercial existente con esta comunidad vecina, así como por las relaciones culturales: "Todo lo que pase en Cataluña, por razones económicas, también de carácter cultural, de cercanía, nos preocupa mucho, porque tenemos también proyectos comunes muy importantes como el Corredor Mediterráneo".
Así, ha proseguido: "Nos produce una situación de intranquilidad lo que está pasando en Cataluña y creemos que habría que recuperar los puentes". A su juicio, tanto el Gobierno de España como el de Cataluña tienen que "cambiar su actitud" y propiciar "una situación en la que nadie haga partidismo y nadie haga confrontación cortoplacista para ganar votos".
Para Puig, el PP ha sido "una fábrica de crear independentistas", pero también la respuesta de la Generalitat catalana ha sido iniciar un camino "que propicia mucha controversia interna en la propia ciudadanía" de la comunidad. En este sentido, confiesa que le "preocupa mucho la división dentro de Cataluña" y, por ello, hay que "propiciar un nuevo diálogo para "garantizar esa singularidad de Cataluña", como también de otros territorios, y la "igualdad entre los ciudadanos". "El problema territorial de España no es sólo Cataluña", ha remarcado Puig, firme defensor del modelo territorial federal.
Puig ha reiterado que "debe haber una fuerza de diálogo permanente y es lo que no ha habido hasta ahora" porque "el PP, junto con los más radicales independentistas, han sido los vectores que han propiciado esta situación" como también lo han sido "ciertamente muchas élites del Estado como el Tribunal Constitucional".
A su juicio, "hay un camino que se debería explorar, que es volver a empezar desde el Estatuto". "Creo que el Estatuto de Autonomía se podría constitucionalizar, ahora muchos independentistas dicen que eso no es suficiente, pero algún movimiento desde el Gobierno de España se podría hacer y abrir la reforma de la Constitución en la que se constitucionalizara aquello que los catalanes aprobaron, que se aprobó en el Congreso y Senado, sería un primer paso", sostiene.
Así, ha alertado de que "una sociedad dividida, si nadie cede, no va a encontrar ningún tipo de punto en común y lo que no se puede tampoco es construir una nueva legalidad rompiendo la legalidad precedente, sino no hay sucesión de legalidad". Considera, de este modo, que "la vía de la confrontación directa no lleva a ningún sitio y lo único que hace es fracturar más la sociedad".
Ante la posibilidad de que se celebre un referéndum unilateral de independencia, Puig cree que "hay que actuar por una parte desde la legalidad, pero por otra desde la política", dado que "si estás en el choque de trenes permanente" llega un momento en que ambos trenes quedan "varados todos en vía" permanentemente. "La solución es la política", ha insistido, para urgir a los responsables a "buscar canales de comunicación permanente y propiciar una nueva atmósfera que, sin que nadie tenga que renunciar a sus principios, haga posible la convivencia".
"Cada uno tiene derecho a tener unos planteamientos ideológicos de máximos, pero la política es llegar a acuerdos, buscar puntos de encuentro. El Estado de las Autonomías ha sido un éxito del país, pero en estos momentos se ha agotado y tenemos que ir hacia un modelo federal que clarifique las cuestiones", ha remarcado.
Según ha manifestado, Cataluña "tiene unas singularidades que hay que admitir" y él cree "en la suma de identidades, en que cada uno puede tener los sentimientos nacionales que quiera" y se debe articular la convivencia en torno a "estas situaciones identitarias", siempre con una mirada "nada sectaria y maniquea".
Por otra parte, preguntado sobre la polémica generada después de que una web oficial catalana presente el embutido de Requena como producto catalán, Puig cree que "esto es una memez, no tiene ningún sentido" porque los embutidos son de Requena, no de Cataluña.
No obstante, el 'president' ha querido dejar claro que quiere que "los viejos fantasmas del pasado de la confrontación se superen por la vía del diálogo y de la claridad" y "la claridad es que la Comunitat Valenciana no es Cataluña ni tiene nada que ver con Cataluña, pero sí queremos tener una buena relación con Cataluña".
"Tenemos mucha relación de carácter comercial, cultural y quiero que eso se cimente desde el respeto, lo que nunca vamos a consentir es que nadie falte al respeto a los valencianos como nosotros nunca vamos a faltar al respeto a los catalanes y estar en una situación de normalidad. Esto son anécdotas, nuestra relación es muy positiva", ha concluido.