VALÈNCIA (EFE). El Consell analizará los efectos que tienen las nuevas restricciones establecidas para frenar los contagios desde el pasado fin de semana y dentro de 10 días volverá a tomar decisiones "si hay que tomarlas", según ha asegurado el presidente de la Generalitat, Ximo Puig.
Como mínimo, hay que esperar y observar los efectos de esas medidas durante diez o quince días para volver a evaluar la evolución de la pandemia, que en estos momentos tiene una tendencia ascendente en los contagios pero al mismo tiempo el índice de reproducción (calcula la media de personas que se infectan a partir de un mismo caso) está estabilizado.
"Veremos la evolución de las restricciones y dentro de diez días volveremos a tomar decisiones si hay que tomarlas", ha manifestado Puig al ser preguntado si habrá más limitaciones, tras intervenir en el Congreso Nacional de CFOs que organiza la Asociación por el Progreso de la Dirección (APD) en València. Además, ha defendido que las restricciones deben adoptarse de forma selectiva y no generalizarlas "cuando no es generalizable", pero sí ser "extraordinariamente prudentes".
En estos momentos la presión hospitalaria aún es "gestionable", va aumentando y disminuyendo pero ahora mismo no está en una situación grave, y además la letalidad ha bajado de manera considerable, ha dicho el president, que ha destacado el comportamiento de la población durante los primeros días del toque de queda en 32 municipios.
"Esa responsabilidad que nos ayudó a salir de la ola de principio de año, nos ayudará ahora a llegar en agosto a una situación en la que podamos, junto al avance de la vacunación, a estar en la mejor de las condiciones", ha precisado Puig, para añadir que en agosto no habrá "plena normalidad" pero sí "la mayor normalidad posible".
Se ha referido a la importancia de hacer compatibles las restricciones con la posibilidad de disfrutar de "un ocio seguro" con las limitaciones establecidas, y ha asegurado que las sanciones al botellón no tienen intención recaudatoria sino que están dirigidas a proteger la salud de los ciudadanos y evitar casos "muy graves" o muertes por contagio.
Según ha dicho, este martes se impusieron algunas sanciones pero se trata de que no haya que sancionar. "Las sanciones son la última frontera, queremos que se cumplan las normas", ha agregado.