VALÈNCIA. (EFE) El hospital Quirónsalud Valencia ha incorporado un nuevo servicio de Traumatología especializado en abordajes mínimamente invasivos y divido en diferentes unidades: pie y tobillo, mano y miembro superior, cadera y raquis.
Según informó este centro en un comunicado, estas unidades están lideradas por especialistas con formación en centros hospitalarios españoles y norteamericanos y son autores de numerosos trabajos científicos sobre nuevas vías de tratamiento.
Dentro del servicio destaca el abordaje artroscópico de las diferentes patologías articulatorias liderado por el doctor Vicente Carratalá, coordinador del servicio y responsable de Cirugía de Mano, con la ayuda de una cámara de apenas 2,5 milímetros de diámetro. Entre sus beneficios, el doctor Carratalá destaca "una recuperación más rápida y con menos dolor para el paciente".
Por su parte, el doctor Rodrígo Díaz, responsable de la Unidad de Pie y Tobillo, añade que "este tipo de cirugías ayudan a curar y diagnosticar un gran número de patologías antes infradiagnosticadas y tratadas erróneamente".
Según los últimos artículos de epidemiología publicados en la revista estadounidense Spine, un 80 % de la población tendrá en algún momento de su vida un problema relacionado con la espalda.
Actualmente, un 40 % de la población sufre dolores crónicos de columna lo que la sitúa como la segunda causa de consulta médica sólo por detrás de las afecciones respiratorias.
"El dato positivo", como indica el doctor Felipe Garibo, responsable de la Unidad de Raquis, "es que el 80 % de las patologías de columna se solucionan con tratamiento conservador, con la prescripción de antiinflamatorios, una modificación de la higiene postural y la realización de ejercicios específicos, de modo que sólo en el 20 % restante de los casos es necesaria una intervención".
Además del abordaje mínimamente invasivo de la patología de columna, la unidad es referente en la utilización y el desarrollo de sistemas dinámicos para el tratamiento de patologías degenerativas de columna que disminuyen, en gran medida, la agresividad de la intervención y las complicaciones a largo plazo, han informado las mismas fuentes.
Esta técnica favorece que la unión entre la zona operada y la sana sea más elástica, lo que posibilita una transición progresiva de cargas en la columna y procura una mejor calidad de vida en el tiempo a los pacientes intervenidos.
"La utilización de sistemas dinámicos de columna", añade el doctor Garibo, "ayuda a prevenir una de las complicaciones más frecuentes en la cirugía de columna, conocido como el síndrome adyacente".
Éste síndrome consiste en la degeneración de la columna y afecta a uno de cada dos de los pacientes intervenidos con las técnicas clásicas en un plazo de cinco años lo que supone la reintervención del paciente en uno de cada cinco casos?.