VALÈNCIA. "La inversión de Hortensia Herrero en Istobal nos da tranquilidad y confianza". Así lo apuntaba el CEO de la compañía, Rafael Tomás, en el encuentro 'Historias inspiradoras', celebrado este martes en el hub del Sabadell Empresa en València. La empresaria valenciana y vicepresidenta de Mercadona invirtió el pasado año en la compañía de puentes de lavado ubicada en L'Alcúdia, de la que ahora ostenta un 22% de la propiedad a través de Herrecha Inversiones.
"De momento, es una inversión que aporta tranquilidad y confianza. También nos echa una mano en ciertos procesos legales y contables, pero todavía no ha hecho un aporte importante en la gestión", señalaba Tomás. "Pero nos da mucha confianza saber que hay un equipo, que no es solo el de Hortensia, sino Marina de Empresas y Lanzadera, que si lo necesitamos está detrás", concretaba. La empresaria comparte consejo de administración con cuatro primos de la familia Tomás separados en dos ramas familiares.
La compañía, con filiales en Portugal, Estados Unidos o China, emplea a más de 900 trabajadores, de la que buena parte son ingenieros. Casi la mitad de éstos se encuentra fuera de España, en una producción de la que un 80% va fuera del país. A día de hoy, la empresa fabrica puentes de lavado para todo tipo de vehículos, tanto utilitarios como industriales, además de químicos y prestación de servicios.
La compañía ingresa un 60% por venta de máquinas, un 30% de servicio y entre un 7 y 8% por los químicos. "Lo cierto es que ya tenemos más técnicos reparando máquinas en la calle que en la fábrica, por eso hemos ido creando más filiales comerciales", señalaba el CEO de la compañía. Respecto al incremento de costes, apuntaba al impacto de la segunda ola de covid con la subida de la energía y las materias primas.
Tomás recalcaba la importancia para la compañía de los mercados de España, Francia y Estados Unidos, que se ha convertido en la corporación en la industria a nivel mundial tras las americanas, mientras que en España tienen una cuota de mercado del 60% en lavado automático. El empresario destacaba el proceso "brutal" de concentración existente en EEUU en el sector, en el que "dos o tres empresas han comprado cada una 10 ó 15 empresas". Mientras, señalaba que en Japón siempre han estado las mismas compañías los últimos 35 años y en China han proliferado numerosas compañías tras no existir sector.
Tomás también destacaba cómo, en los últimos años, la compañía ha cambiado considerablemente su modelo de negocio. Desde la entrada en 2009 en la fabricación de químico a la 'servitización' del producto, en el que cobran por lavados a los clientes en vez de vender la máquina.
Para el CEO de Istobal, uno de los grandes cambios en el sector ha sido el de la conectividad. "Intentamos dar un valor a las máquinas de gama alta reparándolas y prestando soluciones en remoto", explicaba el CEO. En este sentido, destacaba Dinamarca, en el que el 70% de las estaciones de servicio ya no tienen personal. "Hay cámaras e interfonos conectados con nuestra fábrica y podemos resetear y arreglar en remoto", apuntaba. "Esto hace 10 o 12 años no se podía dar".
Sobre el futuro, recalcaba la venta de servicios, que en EEUU se ha plasmado en modelos de suscripción. "Cada vez más se emplean las suscripciones mensuales para lavar las veces que quieras", destacaba. "Esto promueve el uso del lavado, que el consumidor asimila como un gasto fijo y ya no le duele. El lavado da márgenes altos, pero los costes fijos también son altos", destacaba.
Respecto a la sostenibilidad, señalaba que en Inglaterra prácticamente todas las máquinas tienen equipos de reciclaje del agua. También destacaba la exigencia de Suecia, mientras que en China se ha empezado a pedir equipos de reciclaje en todas las máquinas. Sobre la evolución del sector, Tomás apuntaba a lo que puede suponer el uso de coche compartido y autónomo. "Es fácil que bajen a la mitad el número de coches, pero se va a lavar lo mismo o más".
