MADRID. (EP) El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha acusado este jueves al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, de haber presentado una moción de censura para intentar gobernar pero "escapando de la gente", porque "sabe que en las urnas no ganará nunca".
Rajoy ha tomado la palabra en el Pleno del Congreso para replicar por segunda vez al socialista José Luis Ábalos, aunque en algunas ocasiones se ha dirigido a él y en otras directamente a Pedro Sánchez. A él le ha acusado de dejarse llevar por sus "urgencias" por llegar a la Moncloa, sin calibrar cómo va a gobernar y con qué apoyos y desdeñando el impacto que la incertidumbre puede tener en la economía española.
"Todo eso es menor para el señor Sánchez, lo único relevante y lo único que de verdad quiere es llegar como sea, con quien quiera y para lo que sea, comprenderá usted que haya algunos que no nos apuntemos a esto", ha remachado.
Rajoy ha tirado de hemeroteca y ha leído en la tribuna una decena declaraciones de dirigentes y exdirigentes socialistas que, después de las elecciones de 2015 y 2016, rechazaron gobernar con el apoyo explícito o implícito de los independentistas y advirtieron de que no se podía gobernar con 84 diputados.
Palabras de los presidentes de Extremadura, Aragón y Andalucía; del exministro Josep Borrell, del expresidente Felipe González y del diputado de Rafael Simancas, antes de atacar directamente a Sánchez con una declaración del exministro José Bono: "Confié en Sánchez y pronto empecé a percatarme de que habíamos elegido a un bluf".
Y para finalizar, ha recordado a Ábalos sus palabras del pasado enero: "Los independentistas catalanes no pueden ser aliados nuestros ni para una moción de censura". A Ábalos también le ha recordado sus palabras de hace un año, cuando el PSOE no se sumó a la moción de censura que entonces presentó Podemos alegando que se basaba en asuntos que "hasta los chiquillos" conocían desde hace años.
Sin embargo, ha continuado Rajoy, ahora "presentan esta moción por las mismas razones que entonces conocían los chiquillos", pero con la única diferencia de que entonces el candidato era Pablo Iglesias "y no le iban a votar". "Ya sabe lo que tiene que hacer, señor Iglesias, aunque francamente no le recomiendo ser presidente del Gobierno así", ha añadido.
A juicio del presidente, lo que ahora saben "hasta los chiquillos del señor Ábalos" es que Sánchez no ganará nunca en las urnas, ya que tanto en 2015 como en 2016 llevó al PSOE al "peor resultado de su historia. Por eso, ha argumentado "escapa de la gente" y ha optado por presentar "una moción apresurada, destemplada, atrabiliaria y malencarada, producto de las prisas".
Rajoy ha lanzado esta carga contra los socialistas después de afear a Ábalos que no haya respondido a sus preguntas sobre si el PSOE puede presumir de incorrupto. El secretario de Organización socialista había sido breve en su réplica y se había centrado en acusar a Rajoy de pretender "extender la mancha de la corrupción" con el argumento de que "corrupción hay en todas partes" y que "todos" los partidos hacen "lo mismo, porque se trata de una actitud que, a su juicio, daña la imagen de España.
"¿Le parece edificante esa imagen de España? Aún va a decir que forma parte de nuestro patrimonio cultural", ha ironizado el dirigente socialista, a quien Rajoy ha recordado las investigaciones judiciales en marcha sobre la presunta financiación irregular del PSPV.
A este respecto, Ábalos ha criticado que "no es de recibo que el Gobierno le esté pidiendo cuentas a la oposición de cosas que nada tienen que ver con las competencias de la Cámara". "Si creen que extender la mancha de la corrupción sobre todo el país es bueno para el país, si es su forma de querer a este país, dice mucho de lo que les importa", ha espetado.
Rajoy ha ironizado con que Ábalos haya dicho no saber nada "de la financiación del PSPV o del Bloc", igual que de los EREs andaluces: "El que estaba en el ajo era yo, igual que estaba en los casos de Pozuelo y Majadahonda".
Asimismo, el diputado socialista ha señalado, tras escuchar a Rajoy, que es "evidente" que está en un "universo distinto", y le criticado no sólo por minimizar la corrupción de su partido sino por su falta de "originalidad", al ofrecer un "mensaje anclado en los años", consistente en "no querer asumir una realidad incómoda".
"Parece que nos dice: No me molestes con esto. Pero no estamos igual que anteayer. No es fácil homologar. Aquí hablamos de una sentencia que establece un poder independiente del Estado", ha defendido Ábalos, volviendo a recordar la sentencia que de la trama Gürtel que llevó al PSOE a registrar su moción de censura a finales de la pasada semana.
Por su parte, Rajoy ha afeado al PSOE que se diga "contundente con la corrupción" cuando el pasado mes de mayo "se solidarizaba con dos personas" --en alusión a los expresidentes andaluces Manuel Chaves y José Antonio Griñán-- sometidos a juicio por el caso de los ERE.
Y ha insistido en que Ábalos no ha podido rebatirle todo lo que ha dicho de la sentencia de Gürtel: que ningún miembro del Gobierno ni actual miembro del partido ha sido condenado.
Por todo ello, aunque ha parecido mostrar cierta solidaridad con Ábalos porque a los 'números dos' o tres de los partidos siempre les "tocan las cosas más difíciles", le ha advertido de que su intervención para justificar la moción de censura "clama al cielo", y por eso un socialista "no puede ser presidente del Gobierno".