Raúle toma el relevo del flamenco pop en la era digital

VALÈNCIA. El flamenco ya no es lo que era, y eso es algo normal y natural a la par. El jerezano Raúle se enmarca en este género, aunque realmente considera que más allá de eso su música es “sin etiqueta”, y que combina fusión, pop e incluso funk, aunque siempre prevalecen las raíces: “Es la música de Raúle, y lo siguiente será otra cosa. Cuando jugamos tanto con los acordes y las melodías realmente estamos creando en algo que no se podría etiquetar”, comenta el cantante. Al igual que las etiquetas cambian lo hacen también los públicos, en esta nueva era digital que se vive ha cambiado mucho el perfil que le persigue en su gira, además de aquella pareja de Málaga que está en todos sus conciertos: “Diría que hay de todo, de entre los 20 y los 40 años. Pero sí que veo más gente joven, supongo que va un poco con esta idea de poder elegir lo que escuchas, dentro de una diversidad de artistas enorme”.

En este caso, plataformas como Spotify o Instagram le ayudan a conocer y acercarse a sus nuevos públicos, en este momento en el que el flamenco evoluciona a lo digital y se aprovecha de las nuevas mediciones: “Las herramientas de estas redes me ayudan a decidir hacia dónde dirigir mis conciertos. Con Spotify puedo ver dónde me escuchan, y en Instagram me piden que vaya a x ciudades. Gracias a las redes no solo tenemos más visibilidad sino también todas estas herramientas con las que no contábamos hasta ahora”. Así pues, Raúle no tiene que ir como en otros tiempos pegando carteles y esperando que alguien acuda a sus conciertos, sino que puede prever sus sold outs gracias a las redes y a través de los comentarios que recibe: “Nosotros generalmente podemos calcular que en Andalucía este género podía funcionar, pero no imaginaba que iba a ver a tantas personas por España cantando mis canciones, para mi ha sido un shock”.

Otra de las cuestiones de la era digital es el planteamiento de su nombre, que curiosamente es Raule en Spotify: “Cuando ponía Raúle con acento no se entendía, había que hacer una pronunciación muy extraña para que Alexa o Google Home llegara a mi música”, explica el cantante, “es por ello que al final opté por Raule, sin acento, para que se entendiera en este motor de música”. Resulta curioso contemplar este planteamiento, seguro que Tomatito nunca se imaginó como comprendería su nombre un robot o en como aparecería en los motores de búsqueda. Esta pequeña complicación, la del cambio de nombre, es una minucia frente a todas las ventajas que ofrecen las redes para Raúle (con acento), quien gracias a la era digital puede tener tener más tiempo para preocuparse por lo que verdaderamente le importa, su música: "Casi todos mis temas solían ser sociales, y parar en la pandemia me hizo pensar sobre ello, por ejemplo. Muchas veces si hablas de algo que está pasando ahora en 8 años dejará de tener sentido, la canción se pierde, ahí también es donde cada uno pone los puntos". Esta distinción vivirá en la red, para siempre, y podrá buscarse tanto con o sin acento, en un algoritmo que no entiende de "duende" ni de "arte" pero que permite al artista posicionarse, y que le da tiempo para encontrarse al mismo tiempo.