Rebeca Torró (PSPV): "Siempre seré del Ontinyent CF, donde mi madre jugó y ayudé a salvarlo"

VALÈNCIA (EFE/Loli Benlloch). La síndica socialista en Les Corts, Rebeca Torró (Ontinyent, 1981), habla con EFE de su vínculo sentimental con el extinto Ontinyent CF y desvela que es coleccionista de plumas, que haber sido scout le ha marcado, que le gusta cocinar pasteles, y que tiene una hija con sentido del humor que le hace reír.

-¿El deporte forma parte de su vida o ahora mismo es una asignatura pendiente?

-Ha formado parte toda mi vida, porque desde pequeñita he practicado mucho voleibol, aeróbic, aquaeróbic ... Pero estos últimos años me he quedado con el gimnasio, y este último año de consellera, nada.

-Tener una madre que en los 70 jugó en el equipo femenino del Ontinyent CF ¿obliga a ser forofa del equipo local?

-Más que obliga, siempre me ha gustado el fútbol. Ahora la más forofa de casa es mi hija, que tiene 9 años y también lo practica. Mi madre fue una de las de la primera promoción de Ontinyent CF en los años 70, fueron muy revolucionarias. Eso me ha hecho que quisiera más al club. Solo he llorado una vez en el fútbol, y fue por el Ontinyent, que en 2010 no subió a segunda por un 'alcorconazo'.

-¿Alguna anécdota de esos años?

-Participé en la plataforma 'Salvem l'Ontinyent': en la temporada 2011-2012 nos unimos muchos aficionados que queríamos al club, que vivía una crisis bastante importante, y lo salvamos. A los pocos años el club desapareció y ahora está el Ontinyent 1931, en honor al año en que se fundó el primero. Pero para mí siempre quedará aquel Ontinyent CF, del que mi madre formó parte, del que fui socia, donde me sentí muy cómoda, ayudé muchísimo y era el club de mi ciudad. Cuando me preguntan de qué equipo soy, siempre digo del Ontinyent. Y ya luego el Valencia CF.

-Su infancia son recuerdos de...

-De familia, de momentos en la casita de campo de mis abuelos con mis primos. Y también los scouts, con los que estuve de los 9 a los 18 años y me marcaron mucho, incluso después para decidir meterme en política. Para mí los valores de los scouts han sido muy parecidos a los del socialismo.

-¿De dónde le viene la afición a coleccionar plumas estilográficas?

-Tengo una hermana a la que le gustaba coleccionar cosas pequeñitas, como perfumes pequeñitos y botellitas. Un día vi un día una colección de plumas y decidí coleccionarlas. Me las han regalado amigos y familiares, y cuando he visto una que me ha gustado y me la he podido permitir la he comprado. Quitado de una o dos regaladas, son todo plumas económicas, pero ya tengo de todos los colores y de todas las formas, habré reunido unas 50. Y me gusta escribir con pluma, la verdad.

-¿Escribe con pluma a diario, o en ocasiones especiales?

-Voy a lo práctico y utilizo más plumas de marca comercial e incluso sobre todo bolis. He tenido algún percance con las plumas para firmar cosas oficiales como consellera, y siempre termino con las manos muy sucias, por lo que las utilizo más en casa.

-¿Qué lectura tiene entre manos?

-Tengo empezada la novela 'Chica 1983', de Linn Illman. Me la regaló el president Ximo Puig, que es un devorador de libros, pero sobre todo también ama regalarlos y nos hizo un detalle a cada miembro del Consell.

-¿Qué receta borda en la cocina?

-Tengo poco tiempo, pero me gusta cocinar, y sobre todo innovar. Yo soy la de los pasteles y la de los postres en casa, y voy a demanda de lo que me piden. Últimamente me he hartado de hacer bizcochos para mi hija.

-¿Su viaje ideal?

-Ahora mismo necesito descanso y relax, por lo que el viaje ideal es simplemente estar con mi familia y poderme ir a la playa, pero sobre todo a la montaña, que me gusta mucho. Supongo que también me viene por los scouts. Y a perdernos en una cabañita con un laguito, no quiero nada más.

-¿ Y quizá un sitio sin cobertura de móvil?

-Sobre todo eso, además porque mi hija lo agradecerá. En mi casa no soy yo la que tengo que decirle que deje el móvil, sino que mi hija me lo dice a mí, y a veces eso te hace sentir un poco mal. Ha habido momentos en que he tenido que explicarle, sobre todo en mi etapa de alto cargo y de consellera, que no podía no coger el teléfono a este señor de Volkswagen, ni dejar de cogérselo al president. Creo que le debo a mi hija un agosto sin cobertura.

-¿Qué tipo de música escucha?

-Me ha gustado siempre mucho bailar y me gusta la música que se pueda bailar. Últimamente escucho a Carla Morrison, supongo que porque es una voz muy dulce y me da tranquilidad. Me gusta mucho la música que me dé tranquilidad, en mi época de estudiante estudiaba con música clásica.

-¿Es más de aperitivo o de tardeo?

-De aperitivo, pero echo en falta un poco de tardeo con mis amigas, a las que tampoco les he dedicado demasiado tiempo, y a las que les he dicho que nos tenemos que pegar un festival, porque creo que lo merecemos.

-¿Su red social preferida?

-Las enfoco más desde el ámbito profesional/político, no las utilizo para una parte más personal. Hay algunas que cada vez se me hacen más cuesta arriba, porque no me no me gustan los trolls ni los anonimatos. Facebook ha sido siempre la que más me ha gustado, lo tengo muy vinculado a mi ciudad, porque nació cuando fui concejal, y de alguna manera me acerca y hace que no me desconecte de Ontinyent.

-¿Algo que no soporta?

-La mentira. Ni el engaño. Sobre todo cuando hay gente que te engaña y sabe que tú sabes que está mintiendo. Eso no lo soporto, y además, me pone hasta nerviosa.

-¿Y qué le hace reír?

-Sobre todo, ahora me hace reír mi hija. Por suerte tengo una hija con humor. Creo que el humor nunca puede faltar, incluso en las situaciones más complejas y los momentos más intensos. Recuerdo a mi abuelo muriéndose en el hospital, y seguía dándome siempre pinceladas para que me riera. Creo que eso da una enseñanza de vida brutal. Y me alegro de que mi hija haya heredado ese humor.