Recibimiento con música y aplausos a los alumnos realojados del colegio accidentado de Massanassa

VALÈNCIA (EP). La entrada del alumnado del CEIP Lluís Vives de Massanassa realojado en la antigua escuela de Magisterio de València ha dejado momentos emocionantes, ya que los pequeños han sido recibidos con música y aplausos.

Centenares de estudiantes del centro educativo de Massanassa, una de las poblaciones afectadas por la dana del 29 de octubre, se han reincorporado a primera hora de la mañana a las clases en València.

La entrada ha sido muy especial, después de que ayer el derrumbe de un porchado del centro se derrumbara y provocara la muerte de un trabajador de Tragsa de 51 años y heridas a otro operario.

El conseller de Educación, José Antonio Rovira, explicó --tras la "reunión de urgencia" celebrada este domingo en el Palau de la Generalitat-- que el CEIP Lluís Vives estaba considerado como centro "rojo", por lo que "a corto plazo los alumnos no podrían entrar" porque "los destrozos" ocasionados por la riada "son súper importantes", y afectan a "puertas, ventanas, cerramientos, carpinterías exteriores e interiores y acabados". "Está todo arrasado", en palabras del titular de Educación.

Este traslado, según Rovira, es "una solución provisional", puesto que se baraja la opción de "montar ese colegio en aulas prefabricadas".

El pasado 7 de noviembre, en un mensaje en la cuenta municipal de Instagram, el Ayuntamiento de Massanassa difundió un aviso que advertía: "Se prohíbe a toda la población, por precaución, la entrada a los colegios Lluís Vives y Ausiàs March, ante el aviso de posible derribo".

"El Ayuntamiento hizo los avisos pertinentes"

En este sentido, Àlex, de la junta del AMPA del colegio, ha señalado a Europa Press Televisión que el Ayuntamiento de Massanassa "hizo los avisos pertinentes, nos dijo que era zona roja, que se iba a derruir el colegio y se puso una cinta de baliza para que nadie entrara".

"La información del Ayuntamiento que tenemos es que había posibilidades de que se derruyera. Las dos direcciones de los dos colegios, uno de Primaria y otro de Infantil, nos dijeron que había una propuesta de derrumbe. Este colegio tiene 50 años y tenemos problemas de instalación eléctrica. Estaba bastante mal, estaba dentro del Plan Edificant y ahora, desgraciadamente, esto puede que acelere los trámites", ha concluido.