Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. Los hoteles valencianos rescataron en 2021 una parte sustancial de la actividad turística destruida por el coronavirus, pero se quedaron a medio camino de la ansiada recuperación al alcanzar solo 15,5 millones de pernoctaciones, algo más de la mitad de las registradas en 2019, y una ocupación del 45% de las plazas. Los efectos de las últimas olas ya hacían presagiar al sector que la normalidad no se lograría en este ejercicio, en el que los destinos menos dependientes de las llegadas desde el exterior, como la provincia de Castellón, se han acercado más a la época previa a la pandemia. Así se desprende de la última encuesta de ocupación hotelera publicada este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Las cifras de visitantes extranjeros son, de hecho, las que lastran en mayor medida a los hoteles. Todavía en 2021, el turista nacional acaparó en la Comunitat Valenciana siete de cada diez noches registradas en estos establecimientos, un escenario tras el que se esconde una aún relevante caída de las pernoctaciones internacionales en relación a 2019. De este modo, los viajeros residentes en otros países firmaron 4,6 millones de noches durante el pasado año, 14,2 millones menos que antes de la pandemia y casi el doble de las contabilizadas en 2020. Por aquel entonces, incluso se llegó a hablar de catástrofe turística tras perderse un 70% de la actividad hotelera y la mitad del empleo vinculado a este ámbito productivo.
La situación ahora se aleja al menos de la vivida durante el primer año de coronavirus, pese a seguir condicionada por sus vaivenes y las trabas a los desplazamientos largos. En términos generales, los meses de 2021 que más se asemejaron a la normalidad anterior a la covid fueron los más cálidos del año, y en especial agosto. Así, y tras un arranque de año nefasto debido a la tercera ola, las pernoctaciones en hoteles se situaron, durante el mes por excelencia de la temporada veraniega, en el 83% del dato registrado en 2019. Este resultado, dadas las dificultades de las llegadas desde el exterior, se debe sobre todo a la respuesta del turista residente en España, que en agosto casi igualó el número de noches hoteleras realizadas dos años atrás, con 2,51 millones.
En este sentido, la valenciana fue, con 10,8 millones, la tercera región que más noches de turistas nacionales sumó en 2021, solo por detrás de Cataluña y Andalucía. Esta última comunidad evidencia además la importancia del veraneante local en el pasado ejercicio, ya que con 20 millones de estancias de residentes y un total de 30 millones de noches, Andalucía superó a las Baleares o Cataluña y se colocó como la autonomía que más pernoctaciones de hotel contabilizó. En cuanto al turista internacional, y pese a estar todavía muy lejos de sus mejores niveles, Canarias fue la comunidad que sumó más estancias, mientras que la Comuntiat fue la sexta.
En cuanto a las áreas más turísticas de la Comunitat Valenciana, de nuevo las limitaciones a la movilidad son clave para entender sus grandes diferencias. En la Costa Blanca alicantina, en la que Benidorm actúa como una de sus capitales más atractivas, la dependencia de las llegadas desde el exterior deja el total de pernoctaciones contabilizadas en 7,9 millones, un 46% de las registradas durante 2019. En el caso de Benidorm, ese porcentaje se cae además al 35%. En cambio, tanto la costa de Castellón como la de Valencia alcanzaron el 61% de las noches hoteleras sumadas hace dos años, con 3,6 y 1,9 millones de estancias respectivamente.
También en términos de ocupación hotelera se aprecia el avance del sector respecto a los peores momentos de la pandemia, así como un importante margen de mejora hasta las cifras de los tiempos precovid. En 2021, los datos del INE reflejan que se ocupó el 45% de las casi 90.000 plazas hoteleras disponibles de media en la Comunitat a lo largo del año, un registro que mejora el escaso 34 % de ocupación con el que se terminó 2020 y que supone el cuarto mejor porcentaje del país. No obstante, es un dato que aún dista del 60,7 % del último año sin presencia del coronavirus, cuando además había disponibles 38.000 plazas y 186 establecimientos más.
En este mes de enero, y según el avance proporcionado por Hosbec, la ocupación del sector se mantendría en el 50 % para Benidorm y la Costa Blanca, el 60 % en Castellón y el 30 % de Valencia, si bien desde la patronal matizan que en este último caso es donde más establecimientos hoteleros hay abiertos. En relación a estos datos, los primeros que se conocen de 2022, el presidente de Hosbec, Toni Mayor, ha recordado que el invierno es la temporada “más baja del año”, por lo que ha considerado que solo mantener la ocupación de semanas anteriores ya significa que existe “un mercado turístico que soporta todo tipo de adversidades”.
Del mismo modo, Mayor ha incidido en que esta situación evidencia “la fortaleza de los destinos turísticos de la Comunitat”, así como que los hoteleros confían en que, durante este arranque de año, actos programados como el Benidorm Fest en la provincia de Alicante o la gala de los Premios Goya en València influyan de manera positiva en los datos de pernoctaciones y de ocupación en establecimientos hoteleros.
