VALÈNCIA. (EP) Al menos once personas han muerto por una explosión registrada este jueves junto al aeropuerto de Kabul y atribuida supuestamente a un terrorista suicida, según fuentes talibán citadas por la cadena británica BBC y la qatarí Al Yazira, sin que por ahora haya un balance oficial.
El Departamento de Defensa de Estados Unidos ha confirmado a través de su portavoz, John Kirby, que la explosión, ocurrida en la zona de la Abbey Gate, "ha provocado un número desconocido de víctimas".
Un portavoz talibán ha asegurado que hay once víctimas mortales, entre las cuales habría niños, mientras que medios locales como Pajhwok o Ariana hablan ya de "decenas" de heridos. Los medios locales han difundido imágenes de los instantes posteriores al ataque, con civiles transportando a personas que habrían resultado heridas
Las primeras hipótesis apuntan a un atentado suicida, según fuentes consultadas por las cadenas CNN y Al Arabiya, si bien fuentes locales hablan también de posibles disparos en las inmediaciones de la Abbey Gate, uno de los puntos de acceso clave al aeródromo durante el proceso de evacuaciones iniciado hace una semana y media.
Al menos tres militares de Estados Unidos figuran entre los heridos, según fuentes citadas por Fox News. El Ministerio de Defensa de Reino Unido, por su parte, no tiene constancia de que haya víctimas británicas.
La Embajada de Estados Unidos, que el miércoles había lanzado un aviso por un posible atentado inminente, ha recomendado a sus ciudadanos que eviten dirigirse al aeropuerto y a sus puertas tras la explosión registrada. "Los ciudadanos estadounidenses que se encuentran en Abbey Gate, East Gate o North Gate deberían marcharse inmediatamente", ha instado.
Por su parte, el embajador francés en Kabul, David Martinon, ha aconsejado a los "amigos afganos" que se encuentran en las proximidades de la entrada del aeropuerto que se alejen con urgencia y busquen cobijo ya que "es posible una segunda explosión", ha escrito en su Twitter.
Los talibán advirtieron esta semana de que no facilitarían la llegada al aeródromo de ningún ciudadano afgano y también exhortaron a la población a abandonar la zona, aludiendo igualmente a razones de seguridad.
Con los talibán ya prácticamente al mando del país, la principal amenaza ahora deriva de Estado Islámico, que se hace llamar en Afganistán Estado Islámico Provincia de Jorasán. El nombre alude a una región histórica que a día de hoy se reparte entre Afganistán y Pakistán y su objetivo es compartido con otras organizaciones afines: imponer una estricto régimen bajo la 'sharia' o ley islámica.
El grupo, surgido en enero de 2015, se nutre de una amalgama de talibán afganos y paquistaníes. Sus doctrinas son incluso más duras que las de los talibán, a los que consideran herejes y a quienes recriminaron el acuerdo de paz sellado en febrero de 2020 con el entonces Gobierno de Estados Unidos, encabezado por el presidente Donald Trump, punto de partida del repliegue extranjero.
En los últimos años, Estado Islámico Provincia de Jorasán ha sufrido varias derrotas militares y la detención de algunos de sus principales líderes, pero ha terminado creciendo al albor del caos en que se ha visto sumido Afganistán y ha seguido perpetrando atentados, también en Kabul. Entre sus objetivos figuran autoridades locales y fuerzas extranjeras.
Los militares españoles desplegados en Afganistán se encuentran a salvo tras la explosión registrada en las inmediaciones del aeropuerto de Kabul, según han informado fuentes del Ministerio de Defensa.
Las inmediaciones del aeropuerto de Kabul han sido escenario de una explosión de la que se desconoce por ahora si hay víctimas, ha informado el Departamento de Defensa de Estados Unidos.
La deflagración no habría afectado a ningún miembro de las Fuerzas Armadas españolas desplegados en el país, según ha informado Defensa. Tampoco hay constancia de que haya afectado a los miembros de la Policía Nacional que se encuentran allí, ha asegurado el Ministerio de Defensa.
"Podemos confirmar una explosión junto al aeropuerto de Kabul", ha afirmado en Twitter el portavoz del Pentágono, John Kirby, que ha adelantado que seguirán ofreciendo "detalles adicionales" una vez los tengan.