ALICANTE/VALÈNCIA. La reordenación de la cabecera en la línea de AVE que conecta Alicante, Murcia y Madrid entra oficialmente en vigor. Desde este martes, 13 de septiembre, todos los trenes con origen en la provincia pasarán a tener parada término en la estación madrileña de Chamartín, lo que alarga entre 10 y 15 minutos el tiempo de viaje. Ese cambio también se aplicará a los viajes en sentido Alicante, de modo que la de Chamartín será también la cabecera del recorrido.
La única excepción serán los dos servicios diarios que cubren el recorrido Orihuela-Alicante-Madrid, que seguirán llegando hasta la céntrica estación de Atocha (y continuarán partiendo desde la misma terminal).
El cambio supone la primera fase en la reordenación de los tráficos de alta velocidad entre la Comunitat Valenciana y Madrid. A los trenes que parten de Alicante con destino a Madrid se sumarán próximamente los que parten desde València, que a partir de diciembre pasarán a tener como estación término la de Chamartín-Clara Campoamor.
Como en el caso de Alicante, solo dos trenes con salida desde València seguirán parando en Atocha y, todos los demás, llegarán a Chamartín. Con ello, 44 de de los 52 trenes diarios que Renfe o su segunda marcha AVLO operan por sentido cambiarán de estación y los otros ocho permanecerán en Atocha.
Esa situación -anunciada desde 2019- se mantendrá hasta que concluyan las obras de adaptación y ampliación de la capacidad de la estación de Atocha, cuyo plazo de finalización se sitúa entre los años 2027 y 2028, según ha venido defendiendo la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, hasta ahora.
Entre tanto, Chamartín será también punto de partida y de llegada para los nuevos servicios AVE low cost que prevén implantar varios operadores ferroviarios tras la liberalización del sector ferroviario entre los que figura la misma Renfe, con sus trenes AVLO, así como Ouigo o Iryo. Con todo, todavía sigue sin concretarse un calendario cierto sobre la entrada en funcionamiento de sus respectivas propuestas.
Precisamente este lunes, la ministra Raquel Sánchez destacó la puesta en marcha de la remodelación de la estación de Chamartín–Clara Campoamor para adaptarse a las nuevas necesidades de movilidad y convertir Chamartín y Atocha en dos terminales de una única estación.
Lo hizo en un acto en el que estuvo acompañada de la presidenta de Adif y Adif AV, María Luisa Domínguez, así como por responsables de las operadoras de viajeros: el presidente de Renfe, Isaías Táboas; el presidente de Iryo, Carlos Bertomeu; y la directora general de Ouigo España, Hélène Valenzuela.
Allí explicó que los tráficos con destino València seguirán operando temporalmente desde Madrid-Puerta de Atocha, hasta que Chamartín disponga de 8 vías de ancho estándar, con la entrada en servicio en los próximos meses de las nuevas vías 14 y 15.
Según destacó el Adif en un comunicado, la puesta en marcha del túnel que conecta Chamartín y Atocha, el pasado 1 de julio, cumple con el objetivo de adaptación y de acercar el norte y el sur peninsular a través de nuestra red de alta velocidad. La ministra informó que desde este martes un total de 116 servicios semanales utilizarán este túnel para conectar con el este peninsular, dado que los servicios con Levante desde Madrid comenzarán a prestarse desde Chamartín.
Tras el inicio de circulaciones de Avlo en las relaciones de Madrid con Barcelona y València y la entrada Ouigo con Barcelona, el próximo 6 de septiembre Ouigo comenzará a operar también en las relaciones de Madrid-Valencia y se prevé que, en noviembre, lo haga también IRYO entre Barcelona y Madrid.
En todo caso, la reorganización de las estaciones de cabecera no solo trae supuestos inconvenientes. La apertura del nuevo túnel de Adif AV que comunica las terminales de Chamartín y Atocha, y la duplicación de vía entre Atocha y Torrejón de Velasco, ha arrastrado una ventaja competitiva por lo que respecta a las conexiones de Alicante con ciudades del Norte de España. En concreto, Renfe también ha puesto en marcha a partir de este mismo martes, nuevos servicios que acortan el desplazamiento entre Alicante y Ourense, y entre Alicante y León.
Así, el viaje entre Alicante y Ourense pasa a disponer de dos trenes diarios con un tiempo de recorrido de 5 horas y 10 minutos (y un precio de 116 euros), frente a las 6 horas y 15 minutos que se requería para cubrir ese mismo trayecto hasta este lunes, a bordo de trenes de larga distancia. Por su parte, el recorrido entre Alicante y León se acorta en cerca de una hora, ya que pasa a realizarse en 4 horas y 32 minutos (y 113 euros), frente a las 5 horas y 28 minutos que se requerían a bordo de un tren Alvia hasta este lunes.
Además, el estreno de esas nuevas infraestructuras, el pasado 1 de julio, también permitió reducir en 36 minutos 36 minutos en el tiempo de viaje en el Alvia Alicante-Santander en dirección Alicante y 15 minutos en dirección Santander. Además, con la puesta en servicio del nuevo túnel se recupera el servicio Alicante-Gijón, que no se prestaba desde 2020, tras su interrupción con motivo de la pandemia de la covid.