El tripartito excluye de la ley el requisito lingüístico para ser Síndic de Greuges

VALÈNCIA. El pleno de Les Corts debatirá la próxima semana la nueva ley del Síndic de Greuges. Una norma que pretende actualizar la anterior de 1988 y en la que no se exigirá a los futuros síndics o síndicas que acrediten cuál es su conocimiento del valenciano. Es decir, el valenciano no será requisito indispensable para ser nombrado al frente de esta institución. 

El texto legal apenas señala, tanto en su artículo 4 como en el 13, que el defensor del pueblo deberá "conocer los dos idiomas oficiales de la Comunitat Valenciana". Sin embargo, no establece a lo largo de todo el articulado que estos conocimientos tengan que acreditarse de alguna manera por parte del aspirante a Síndic de Greuges. 

Un vacío al que Compromís restó importancia este martes en la rueda de prensa tras la Junta de Síndics al entender que si la norma contempla que se deberá conocer el valenciano de alguna manera deberá probarse. Es decir, en la coalición sí consideran que la ley es clara a la hora de establecer el valenciano como requisito. 

El síndic de los valencianistas, Fran Ferri, remarcó que "simplemente" la ley se debatirá "conforme viene de Conselleria". "Estamos totalmente de acuerdo con que la ley se quede como está", subrayó para insistir más tarde que ese conocimiento "se tendrá que avalar de alguna manera" y que podría ser a través de un reglamento posterior. Sin embargo, lo cierto es que no existe mención expresa a él, como sí ocurre por contra con la Ley de Función Pública valenciana. 

La ley que regula el acceso a la Administración autonómica, por su parte, fija que los aspirantes a empleados públicos deberán "acreditar la competencia lingüística en los conocimientos de valenciano que se determine reglamentariamente, respetando el principio de proporcionalidad y adecuación entre el nivel de exigencia y las funciones correspondientes". 

Por contra, en el proyecto de ley del Síndic de Greuges no se desarrolla que se deberá acreditar el conocimiento del valenciano, ni tampoco recoge que en un reglamento posterior se pondrá negro sobre blanco para concretar de qué manera se valorará el conocimiento de las dos lenguas oficiales por parte de los aspirantes. Por lo que, de aprobarse tal y como se encuentra ahora mismo redactada la ley de acuerdo al dictamen que ha elaborado esta semana la comisión de Les Corts donde se debate la norma, los síndics no tendrán como condición sine qua non probar que conocen el valenciano. 

La oposición

En este sentido, la diputada de Ciudadanos Mamen Peris advirtió este martes que el hecho de que la ley no exija el requisito lingüístico ni los grupos parlamentarios del Botànic hayan presentado enmiendas para incorporarlo es un factor que favorece el acuerdo entre los grupos de la oposición y los del tripartito. "Hay un amplio consenso con los partidos del gobierno a falta de algún fleco para sacar adelante la ley", explicó tras garantizar que "no se impondrá un requisito lingüístico" sino que el Síndic simplemente tendrá que conocer el valenciano y el castellano. "Con entenderlo basta", concluyó.