Reusa’m: la misión de Furió y Martí para que tu vaso de café siempre sea el mismo

VALÈNCIA. El saco adorable con el que ir al horno, embuchando el pan de hoy. La botella de cristal reutilizable con la que acudir al colmado a devolverla vacía. Usos hechos antiguallas por la misma razón vertiginosa que induce a rellenar el vacío con nuevos productos, en un bucle infinito que solo habría hecho que comenzar. Demasiadas veces ponemos el dedo en los materiales de nuestras prácticas cotidianas: cómo hacerlas más compostables, con menos perjuicio. Pero puede que resulte más exigente apuntar directamente al uso. Por qué lo hacemos así y por qué no de otra manera. Plantearlo supone una rebeldía frente a la cotidianidad traída por la inercia y las costumbres.

Conducirnos por las calles con nuestro café en la mano tiene que ver con un placer emparejado a la aspiración -amamantada en el cine y la televisión- de tomar la ciudad por una cafetería cálida donde avanzar sobre seguro. El reverso es la acumulación de vasos: cerca de 1.500 millones de envases de café al año, según cifras de Greenpeace en 2019.

“Una nueva forma de hacer las cosas”, enseñan, titulando, los diseñadores Julia Furió y Migue Martí, desde València, creadoras de Reusa’m, el nuevo servicio que desde hace unos días se ha hecho presentes en las principales cafeterías de especialidad de la ciudad. Furió y Martí simbolizan, además, una de las vías más límpidas del diseño valenciano por su empeño en hacer del diseño una vocación con la que detener la generación innecesaria de residuos. Su visión, exenta de edulcorantes, confiere al oficio de diseñador un papel estratégico para abordar parte del atolladero ambiental en el que nos encontramos.

-¿Cuál fue el detonante para crear Reusa’m?
-Julia Furió y Migue Martí: Es el resultado de muchos años de búsqueda constante, aprendiendo a vivir de manera coherente y consciente con los límites biológicos y físicos de la Tierra; de consumir de forma responsable. Nace con la finalidad de unir valores personales y profesionales. Fue hace un año cuando su semilla empezó a germinar. Vimos que en el norte de España, un chico llamado Ander, abre el primer servicio de depósito de vasos reutilizables, lrrisarri. Ahí fué cuándo Julia, después de vivir la maternidad en plena pandemia, se da cuenta de que es un proyecto viable, que no requiere de grandes infraestructuras, y puede compaginarse con su otro trabajo. Esta idea posee todo el discurso que Julia (Furió) lleva años abanderando: la reducción de residuos y el diseño circular.

-A todo esto, ¿cómo se usa?
-Julia Furió y Migue Martí: Empezamos diciendo que somos “el primer servicio de depósito de vasos reutilizables de València”, y según la cara que ponga la persona que tenemos enfrente, empezamos a desmigar la definición hasta que vemos que esta le empieza a cambiar. Continuamos explicando que somos una alternativa a los vasos de usar y tirar del café para llevar, cada día, por cierto, más extendido. Nuestro lema es muy sencillo: Pide, Disfruta y Devuelve. PIDE. Contamos con once locales en València donde puedes pedir y devolver el vaso Reusa´m, dejando un depósito de 3 euros que luego se te devuelve cuando devuelves el vaso, en el local donde lo adquiriste o en cualquier otro local dentro de la red.

Básicamente es una idea muy similar a la que utilizaban nuestras abuelas, cuando dejaban los “cascos” de las botellas de vino, leche o refrescos en el ultramarinos de confianza.

-Ambos sois diseñadores. ¿Qué significado tiene que un proyecto así se conciba desde el diseño?
-Julia Furió y Migue Martí: Todo lo que se pone en el mercado está previamente diseñado, y es ahí en la fase del diseño cuándo se deciden muchos aspectos que harán que su impacto ambiental sea mayor o menor. El diseño es una herramienta que tiene como objetivo comunicar y resolver problemas. Por lo tanto, un objeto de usar y tirar es un mal diseño.

Desde el inicio hemos tenido muy claro que debíamos llegar a un público muy amplio. No queremos un proyecto para un target reducido con una alta sensibilidad medioambiental, sino que nuestro propósito es normalizar la reutilización en cualquier persona. La imagen pretende atraer rápidamente con un código visual muy sencillo. Algo fácil de entender por cualquiera y adaptable a negocios y usuarios de diferentes perfiles.

-¿La mayoría de diseños apuestan lo suficiente por plantear nuevos hábitos ambientales?
-Julia Furió y Migue Martí: Rotundamente no. Una gran parte del diseño fomenta el consumo descontrolado. El packaging, el fast fashion o el branding, que claramente utilizan el diseño como herramienta, son causantes de grandes problemas medioambientales. Nuestro planeta no puede digerir el ritmo de consumo actual y el diseño, en muchas ocasiones, es partícipe de ello.

Somos conscientes de esto y por eso pensamos que los consumidores y los diseñadores debemos actuar con responsabilidad.

-¿Es València un buen lugar desde el que fomentar la reutilización?
-Julia Furió y Migue Martí: Estamos convencidos de que esta ciudad es un lugar muy favorable para dar un giro radical hacia el consumo circular. En los últimos meses nos hemos topado de frente con una conciencia ecológica mucho mayor de lo que podíamos imaginar. Los establecimientos reclaman sistemas similares al que planteamos y los usuarios tienen una fuerte predisposición a participar en ellos. Somos conscientes que es necesario impulsar un cambio de paradigma en València y desde Reusa’m tenemos muy claro que debemos formar parte de él. La sociedad ha tomado conciencia de sus impactos en el medio ambiente. Soñamos con las calles más limpias y manos llenas de vasos reutilizables.