VALÈNCIA. (EFE). El alcalde de València, Joan Ribó, ha asegurado que estudian si es posible una rebaja del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a los vecinos de Pinedo, así como Ayudas de Regeneración y Reurbanización Urbana (Arru) para "compensar" las molestias y pérdidas sufridas durante 40 años por la depuradora.
Ribó ha asegurado a EFE antes del pleno de este jueves que se trata de iniciativas "incipientes" y que no sabe si se podrán aplicar, pero ha destacado que han estado trabajando con la Conselleria de Medio Ambiente "para buscar soluciones" que eviten tener que ejecutar la sentencia que obliga al cierre de la depuradora.
El portavoz de los vecinos de Pinedo, Jaume Chornet, ha dado la "bienvenida" a este tipo de medidas, pero ha asegurado a EFE que "no son "suficientes" y que después de "casi mil días con la sentencia firme en la mano" su intención es seguir pidiendo su ejecución y reclamar compensaciones económicas a "40 años de ruina".
Los vecinos reclamaron la "ejecución forzosa" de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia valenciano tras más de dos años y el tribunal dio diez días a las Administraciones para presentar sus alegaciones y explicar cómo se cerrará la depuradora, cuyo plazo concluye este viernes a las tres de la tarde.
La Conselleria ha confirmado a EFE que este miércoles presentó su escrito, en el que explica que la Entidad de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar), que gestiona la depuradora, invertirá veinticinco millones para aplicar medidas correctoras por los olores, ruidos y emisiones por la depuradora, así como el tráfico pesado.
Igualmente, alegan que el plan especial del que carece la depuradora y que era pertinente en este tipo de instalaciones, está "a punto de evaluación ambiental" para "subsanar" esta deficiencia.
Las mismas fuentes han señalado que también se le ha informado de los perjuicios que podría haber como consecuencia de un eventual cierre de la depuradora y han recordado que a quien han pedido esa clausura es al Ayuntamiento.
Ribó ha indicado que la depuradora, dependiente de la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi) y gestionada por Epsar, "no depende directamente del Ayuntamiento" y su cierre correspondería a Emshi y no al Ayuntamiento.
Ademas de los 25 millones de la Epsar, ha destacado que el Plan de Acción Territorial de la Huerta "va a levantar todas la suspensiones de licencias", una de las reivindicaciones vecinales.
Ha hecho hincapié en que "hay proyectos en fase de estudio, como cambiar la zona de ampliación de la depuradora en una zona de la ZAL, que técnicamente es posible" y se estudia "cómo hacerlo jurídicamente".
"También trabajamos en algún tipo de rebaja del IBI, cosa que no sabemos si es posible y está incipiente, y un ARRU, ayudas para la rehabilitación de viviendas, como compensación a los inconvenientes sufridos", ha concluido.
Tras conocer estas iniciativas, Chornet ha asegurado que a fecha de hoy "no" tienen "constancia de nada" y "nadie" se ha puesto en contacto con los vecinos desde la última reunión hace un mes.
"Sería visto con buenos ojos que nos rebajen el IBI y nos den ayudas para rehabilitar las casas pero no es suficiente", ha asegurado para recordar que estas medidas las pedían en su decálogo pero son "flecos secundarios" porque lo que quieren es "una compensación económica, porque son 40 años de ruina".
El portavoz del grupo municipal de Ciudadanos, Fernando Giner, ha recordado que una de sus alegaciones al presupuesto municipal iba en esta línea. Según la petición séptima de su escrito, la formación naranja pedía aplicar un "sistema de bonificación para aquellas familias afectadas por instalaciones fundamentales del municipio" atendiendo a la máxima de 'el que contamina, paga'.
Giner ha resaltado que el equipo de gobierno "ha votado en contra diciendo que es demagogia e imposible". "Ahora, Ribó se la copia", ha insistido el portavoz, que ha manifestado su respaldo a la propuesta del alcalde: "Es lo que hay que hacer". "Claro que se pueden bajar impuestos pensando en las personas que no están recibiendo los servicios que se merecen, y en València hay bastantes colectivos en esta situación", ha concluido.