Rita Barberá declarará voluntariamente ante el Tribunal Supremo en noviembre o diciembre

VALENCIA. La senadora designada a propuesta del Partido Popular y exalcaldesa de Valencia Rita Barberá acudirá de forma voluntaria a declarar ante el Tribunal Supremo, de acuerdo con lo que prevé la Ley de Enjuiciamiento Criminal en su artículo 118, que le permite ejercitar su derecho de defensa desde el primer momento, por lo que puede ir a declarar sin necesidad de un suplicatorio al Senado. 

El Alto Tribunal decidió el pasado 13 de septiembre abrir procedimiento contra la exalcaldesa por indicios de participación en el presunto blanqueo de comisiones ilegales del PP de Valencia investigada en el curso de la operación Taula.

Barberá, ahora en el Grupo Mixto del Senado, aceptará explicar su versión de los hechos cuando reciba la citación del magistrado instructor de la causa, Cándido Conde-Pumpido. Por tanto evitará por el momento un paso en el procedimiento, que sería el envío de un suplicatorio por parte del juez al Senado.

La declaración se considera voluntaria porque la hará sin que el Senado dé su permiso para imputarla. Será así porque la defensa de Barberá ya ha puesto en conocimiento del Tribunal Supremo su intención de facilitar el proceso que tiene la senadora y exalcaldesa.

Valencia Plaza ha podido hablar con el letrado de la exalcaldesa, José Antonio Choclán, quien ha dejado muy claro que "bajo ningún concepto se plantean recusar al magistrado instructor", y que "hay un respeto máximo al tribunal". Con estas declaraciones Choclán pone fin a las especulaciones sobre si Rita Barberá pediría la recusación de Conde-Pumpido por haber sido fiscal general del Estado (FGE) a propuesta del PSOE.

A este respecto, ha habido polémica desde que el exFGE fuera nombrado como instructor. Altos dirigentes del Partido Popular mostraron su indignación porque fuera Conde-Pumpido el encargado de investigar si la senadora ha cometido o no un delito. Así lo hizo, por ejemplo, la diputada Celia Villalobos, que llegó a aconsejar a la exalcaldesa que renunciara "a toda leche" a su escaño de senadora para evitar ser juzgada por Cándido Conde-Pumpido, de quien afirmó: "Confío en los jueces pero no en Conde-Pumpido".

La citación, tal y como desveló Ernesto Ekaizer en El País, se prevé para finales de noviembre o casi con total seguridad en diciembre. Esto es así porque existe una norma no escrita en el Tribunal Supremo que dice que no se toma ninguna decisión que pueda afectar a la gobernabilidad del Estado y, por tanto, Cándido Conde-Pumpido no citará a Barberá hasta que se haya elegido presidente del Gobierno, cosa que previsiblemente ocurrirá la última semana de octubre en la persona de Mariano Rajoy.

Suplicatorio

Así, si Barberá acude a declarar voluntariamente, el magistrado instructor solo deberá enviar un suplicatorio al Senado en caso de que decida procesar a la senadora una vez terminada la instrucción, con la consiguiente investigación que de ella se derive. Pero también cabe la posibilidad de que archive la causa una vez le tome declaración y estudie la documentación que se le ha enviado desde el Juzgado de Instrucción número 18 de Valencia.

Rita Barberá tiene abierta esta causa por, presuntamente, blanquear dinero para el PP de Valencia. En esta pieza separada, con 48 personas imputadas más el PP como persona jurídica, se investigan las donaciones de 1.000 euros efectuadas por concejales y asesores, cantidad que presuntamente les era devuelta por el partido en dos billetes de 500 euros para blanquear dinero en efectivo de supuesta procedencia ilícita. Dicho dinero se utilizó, presuntamente, para financiar la campaña electoral del Partido Popular de la ciudad de Valencia en las últimas elecciones municipales en mayo de 2015.