MADRID (EP). Sacyr confía en lograr un acuerdo amistoso con la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) sobre las reclamaciones de unos 3.000 millones de dólares (2.690 millones de euros) que tienen formuladas por los sobrecostes del Canal para evitar así años de litigios.
"Una historia de éxito debe acabar con acuerdo razonable y en ello trabajaremos", aseguró el presidente de Sacyr, grupo que lidera el consorcio que ha construido la ampliación del Canal Panameño.
Según el consorcio, el proyecto, que se inaugura el próximo mes, ha costado 5.581 millones de dólares (5.004 millones de euros), importe muy superior al de 3.192 millones de dólares (2.862 millones de euros) al que se adjudicó la obra en julio de 2009.
La diferencia entre ambos importes, unos 3.000 millones de dólares (2.690 millones de euros), constituye el monto que Sacyr y sus socios en el consorcio reclaman a Panamá como sobrecostes.
Según lo establecido en el contrato, el reconocimiento, y por lo tanto, el pago de estos sobrecostes, es un asunto que deben dirimir, tres instancias sucesivas, la última de ellas el Tribunal de Arbitraje internacional. "Este proceso de reclamación es muy largo para todos, con lo que, lo razonable es que en un determinado tiempo, se llegue a un punto de acuerdo", apuntó Manrique.
La voluntad del consorcio es comenzar a trabajar con la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) sobre este acuerdo una vez la ampliación del Canal se inaugure el próximo 26 de junio, "cuando los barcos empiecen a pasar y el proyecto sea un éxito".
Sacyr está abierto a distintos tipos de acuerdo. Así, contempla desde lograr un pacto integral sobre todas las reclamaciones hasta uno "mixto" sobre parte de ellas o que contemple otros supuestos.
En este punto, el presidente de Sacyr ligó el posible acuerdo a la posibilidad de extender el periodo inicial de tres años en el que Sacyr se encargará de mantener el nuevo Canal de Panamá una vez lo entregue al país el próximo 31 de mayo.
"La ampliación del Canal de Panamá es una historia de éxito absoluto para España y Panamá, y no puede ser que esta historia de éxito no acabe de una manera razonable, y en ello estamos trabajando", anunció Manrique durante un acto en Panamá con motivo de la entrega de la obra. "Buscamos fórmulas razonables para no estar años en los arbitrajes", explicó.
Sacyr, que controla el consorcio contratista de la ampliación del Canal, confía en que se le reconozcan al menos la mitad de las reclamaciones planteadas. De esta forma, la compañía podrá revertir los 500 millones de euros que tiene provisionados por la obra y evitar así que este emblemático proyecto le cueste dinero.