VALÈNCIA. El último paquete de sanciones aprobado por la Unión Europea (UE) contra Rusia ha llegado hasta el absurdo de castigar a los motoristas del Nightwolves, el club motociclista equivalente a los Hells Angels de los Estados Unidos y con los que les unen lazos en la carretera. Nada que ver con el desastre para la economía valenciana que supuso la primera etapa de sanciones en 2014, en respuesta a la anexión rusa de Crimea, en la que el gobierno de Putin reaccionó a las sanciones europeas con el cese de importaciones de naranjas y caquis valencianos.
De hecho, el presidente de Fedacova -la patronal valenciana de productos alimentarios-, Rafael Juan, reconoció que la respuesta de Rusia a las sanciones por la guerra de Ucrania no hacía daño a la Comunitat Valenciana, ya que sólo exporta "por valor de 40 millones de euros" al año.
Esta declaración tuvo lugar en la mesa redonda sobre “La internacionalització de la indústria en un món en conflicte, durante la 39 edición de la Universitat d’Estiu de Gandia, y en el marco del seminario “La guerra ruso-ucraniana desde una mirada valenciana. De la geopolítica a la economía”, organizado por la profesora dela Universitat de València Rosa Roig y con el catedrático Joan Romero en la ponencia inaugural.
Entre el público, recordaron que el daño a las exportaciones valencianas de cítricos ya se produjo tras la anexión de Crimea, en 2014. “El desastre para las comarcas, especialmente La Ribera, fue brutal, haciendo desaparecer el cultivo del caqui y sumiendo a los agricultores valencianos en bancarrota”, manifestó Barbara Peris, ex dirigente del Bloc-Compromís, que asistió la jornada. Otros participantes de esta mesa redonda fueron José Vicente Morata, Presidente de la Cambra de Comerç de València y Júlia Company, Directora del IVACE, de la Generalitat Valenciana.
Respecto a las últimas sanciones aprobadas contra Rusia, se ha decidido imponer medidas restrictivas a otras 54 personas y 10 entidades. Esta decisión se suma al paquete de sanciones de "mantenimiento y alineación" adoptado por el Consejo el 21 de julio de 2022. Entre los sancionados hay otro importante banco ruso, Sberbank, al que se le impide realizar transacciones fuera de Rusia.
También se añaden más personas involucradas en la agresión contra Ucrania, como “oficiales militares, el club de motocicletas de los Nightwolves y actores de desinformación”, explicó Josep Borrell, Alto Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad.
Resulta curioso la inclusión entre los sancionados de los Nightwolves (Lobos de la Noche), un club de motoristas rusos nacido con la caída de la Unión Soviética, en 1989, y con claras influencias y lazos con sus homólogos norteamericanos, los Hells Angels. No obstante, hay que recordar que en 2013, su líder Alexander Zaldostanov fue condecorado por Vladimir Putin con la Medalla de Honor, por sus manifestaciones de apoyo contra Ucrania, ofreciéndose como un especie de milicias al presidente ruso. La UE les ha señalo como objetivo por convertirse en un elemento desestabilizador y de propaganda del Kremlin. Les prohíbe circular por territorio de la Unión.
Las personas incluidas en la lista, publicada el jueves por el Diario Oficial de la UE, incluyen miembros de alto rango del estamento político o cultural, como miembros del Estado y de las Dumas provinciales, y políticos locales como el alcalde de Moscú. También se enumeran líderes militares y personal de alto rango, políticos nombrados en territorios ucranianos invadidos por Rusia y destacados empresarios.
Además de empresas que operan en el sector militar o en la industria de la construcción naval o involucradas en el robo de grano ucraniano, y una variedad de entidades que han difundido propaganda pro-del Kremlin y antiucraniana. El régimen sirio está en el punto de mira, al proporcionar apoyo militar, y otras seis personas y una entidad involucradas en el reclutamiento de mercenarios sirios para luchar en Ucrania junto con las tropas rusas.
En total, “las medidas restrictivas de la UE con respecto a las acciones que socavan o amenazan la integridad territorial, la soberanía y la independencia de Ucrania se aplican en estos momentos a un total de 1.212 personas y 108 entidades. Los sancionados están sujetos a una congelación de activos, y a los ciudadanos y empresas de la UE se les prohíbe poner fondos a su disposición. Además, las personas físicas están sujetas a una prohibición de viajar, que les impide entrar o transitar por los territorios de la UE, caso de los motoristas rusos.
Con el fin de responsabilizar plenamente al régimen sirio por su papel en Ucrania, el Consejo también ha apuntado a otras cuatro personas y una entidad dentro de un régimen de sanciones separado en relación con las medidas restrictivas en vista de la situación en Siria. Éstos incluyen a un oficial militar de alto rango implicado en el reclutamiento de mercenarios sirios para luchar en Ucrania junto a Rusia, personas que se benefician o apoyan al régimen y un destacado empresario que opera en Siria.
La UE ha condenado los ataques indiscriminados de Rusia contra civiles e infraestructuras civiles, e insta a Rusia a que retire inmediata e incondicionalmente todas sus tropas y el equipo militar de todo el territorio de Ucrania dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas. El Consejo exige que “debe respetarse el derecho internacional humanitario, incluido el tratamiento de los prisioneros de guerra”. Y añade que a los ucranianos, en particular a los niños que han sido trasladados por la fuerza a Rusia, se les debe permitir inmediatamente regresar de forma segura. “Rusia, Bielorrusia y todos los responsables de crímenes de guerra y los demás crímenes más graves tendrán que rendir cuentas de sus acciones, de conformidad con el derecho internacional”, añade el comunicado del Consejo de la UE.
En sus conclusiones de los días 23 y 24 de junio de 2022, el Consejo Europeo subrayó que la UE seguía firmemente comprometida a proporcionar más apoyo militar para ayudar a Ucrania "para que pueda ejercer su derecho inherente de legítima defensa contra la agresión rusa, y defender su integridad territorial y soberanía”.