VALÈNCIA. Los Servicios Sociales de Atención Primaria en la Comunitat Valenciana priorizarán la atención de personas que sufran desprotección social provocada o agravada por la pandemia del coronavirus. Así lo recoge la resolución de la Conselleria de Igualdad en la que se marcan las directrices para organizar el área con motivo del desconfinamiento del estado de alarma.
Tal y como publicaba Valencia Plaza este martes, la plantilla de los diversos centros tendrá que volver al completo en la Fase 1 y lo hará atendiendo de forma prioritaria las situaciones desprotección que puedan darse como consecuencia de la pandemia. Entre ellas se encuentran las personas mayores, con diversidad funcional o con problemas de salud mental que asistían a centros diurnos, que no sean atendidas a domicilio por tener red familiar, pero cuyas personas cuidadoras se hayan infectado por Covid-19 o estén aisladas por sospecha.
También las personas mayores o personas con pluripatologías previas o inmuno-deprimidas, que sin tener una prestación o servicio previo asignado, a causa de la pandemia se encuentren en una situación de necesidad por su especial vulnerabilidad y al objeto de evitar al máximo que tengan que romper el confinamiento para satisfacer necesidades básicas, médicas o farmacéuticas. También niños, niñas y adolescentes que por el contagio por Covid-19 de su persona o personas progenitoras, tutoras, acogedoras o cuidadoras se puedan encontrar en una situación de desamparo o riesgo de contagio.
A éstos se suman niños, niñas y adolescentes que tuvieran una beca parcial de comedor escolar de la Generalitat o municipal a quienes esté afectandolos cierres de los comedores escolares a causa de la pandemia. También personas contagiadas por Covid-19 que por las características de su vivienda y núcleo de convivencia no puedan cumplir las normas de aislamiento, especialmente en aquellos casos que en el núcleo de convivencia se encuentren personas mayores o personas con pluripatologías previas o inmunodeprimidas.
En sexto lugar se contemplan las personas sin hogar. También las personas que a raíz de la pandemia hayan perdido su fuente de ingresos económicos y no estén cubiertas por las medidas puestas en marcha por la Administración general del Estado. La resolución también incluye a las personas que a raíz de la Covid-19 no hayan podido despedirse de un ser querido ni compartir el duelo de manera comunitaria pudiéndoles ocasionar este hecho inestabilidad emocional o psíquica, además de personas que a raíz del aislamiento provocado por la etapa desconfinamiento puedan desarrollar inestabilidad emocional o psíquica.
Mientras, la norma especifica que la persona que fue nombrada por la dirección de servicios sociales de atención primaria encargada de coordinar específicamente todas las acciones relacionas con la pandemia por Covid-19 y mantener la comunicación con la Dirección General de Atención Primaria y Autonomía Personal, seguirá al frente de dicha función y notificará las posibles incidencias detectadas en el funcionamiento de los servicios prestados provocadas por la pandemia Covid-19.
Además, elaborará un informe final evaluado de las actuaciones realizadas, las incidencias ocurridas y cualquier otro hecho que considere relevante para poder analizar la respuesta dada por el sistema público valenciano de servicios sociales y las posibles cuestiones a mejorar en un futuro. Dicho informe diferenciará tres etapas: la etapa de confinamiento, comprendida entre el 14 de marzo y el 11 de mayo de 2020, la etapa de desescalada, comprendida entre el 12 de mayo y el 21 de junio de 2020 y finalmente, la etapa de nueva normalidad, desde el 23 de junio en adelante.
Este informe servirá de base para la redacción de un plan de contingencia preparatorio de una posible segunda oleada de la pandemia por Covid-19 en el otoño de 2020 de manera que se pueda anticiparlas medidas a tomar ante esta previsión. La evaluación realizada en el informe con los indicadores pertinentes orientará las actuaciones de cara a este escenario. Un plan de contingencia deberá ser remitido a la Dirección General de Atención Primaria y Autonomía Personal como máximo el 31 de julio de 2020 para su estudio y validación.