VALÈNCIA (EP). El comité de empresa de Marina Salud ha pedido, para solucionar los problemas del departamento de Dénia, "aumentar y dar estabilidad a la plantilla de forma urgente", algo que califican de "imprescindible" y que pasa por "revertir la concesion y realizar una fuerte inversión en gastos de personal, aumento de plantilla en todas las categorías y adecuación de los salarios al entorno".
Los sindicatos advierten de que ante la "inacción" de la Conselleria de Sanidad y una situación que "seguirá empeorando", iniciarán movilizaciones y no se detendrán hasta tener "una solución definitiva".
Así lo han apuntado en un comunicado en el que lamentan que la promesa del president de la Generalitat, Ximo Puig, de que va a revertir Marina Salud para la gestión pública en esta legislatura "sigue sin cumplirse cuando faltan menos de seis meses para las elecciones autonómicas", lo que constataron en una "reciente reunión" de los representantes de los trabajadores con la Alta Inspección de la Conselleria de Sanidad, en la que les trasladaron que la operación es "muy difícil".
Además, han recordado que la Conselleria ha recibido dos informes jurídicos no vinculantes son contrarios a la subrogación de los trabajadores desde una mercantil hacia la administración: el del Consell Jurídic Consultiu y de Abogacía de la Generalitat, en el caso de la internalización de las resonancias.
"Ajustándonos a la legalidad vigente, la fórmula que hemos solicitado a la Alta Inspección es la de personal indefinido fijo a extinguir, ya que es la figura jurídica que ofrece las mayores garantías a los trabajadores", señalan los sindicato, que recalcan que esta es la aplicada para la reversión de Alzira y que recoge la Ley de Salud de la Comunitat Valenciana.
En esta línea, recalcan que, en medio de "tanta incertidumbre" sobre el futuro, "la realidad laboral actual en Marina Salud debe calificarse de muy mala para los trabajadores, sin que apenas se haya notado la entrada de esta última Gerencia".
De hecho, afirman que mientras que la población y los ingresos por cápita han aumentado (+3,4%), las condiciones laborales "permanecen estancadas al nivel de 2014, y la plantilla no ha aumentado en relación al crecimiento de la población asignada". "Seguimos con el mismo convenio prorrogado desde la crisis, sin subida salarial alguna, sin trienios, sin carrera profesional y con recortes en el precio de las guardias", lamentan.
Frente a esto, aseguran que la empresa "se escuda diciendo que se han producido grandes aumentos de gasto en farmacia hospitalaria, traslados, etc, para hacernos una oferta irrisoria" y critican que la partida de mejoras al personal "siempre ocupa el último lugar entre las prioridades de la empresa".
"El argumento es que sufren fuertes pérdidas acumuladas desde el inicio de la concesión, y que estas ascienden a 14 millones de euros, cuando sólo faltan cinco años para que finalice el contrato, lo que para cualquier sociedad anónima normal equivaldría a una quiebra sin paliativos", detallan.
Sin embargo, frente a ese "pesimismo y a esos malos augurios", las cuentas oficiales "arrojan un beneficio acumulado de 4,5 millones a finales de 2017". Así, subraya que ateniéndose a la explicación de la empresa, "la realidad va por un lado -pérdidas-, y la cuenta oficial de resultados por otro -ganancias-" y entre ambos escenarios "hay casi 20 millones de euros de diferencia".
Por este motivo, los trabajadores quieren que "se cierren las liquidaciones y conocer la realidad económica de la empresa". "Y una vez cerradas, si se confirma la falta de viabilidad, la Generalitat Valenciana debería intervenir y rescatar a la concesión, sin más dilación", añaden.
Los sindicatos, que coomparan la situación de Marina Salud con el resto de departamentos, advierten de que la situación "irá a peor en el momento en que la Consellería inicie el pago de la carrera profesional a los interinos, o si la Conselleria decide no revertir la concesión".
En este contexto, reclaman poner en marcha la carrera profesional, "cuanto antes", para no perder competitividad; "taponar la incesante fuga de profesionales con mayor experiencia si se quiere mantener la calidad asistencial" y abrir la bolsa de la Conselleria de Sanidad en este departamento de salud (que está cerrada desde la llegada de Marina Salud), "antes de que la situación sea irremediable" o exigir a la mercantil "que haga una fuerte inversión en plantilla, que no parece estar en disposición ni en condiciones de realizar".