16/10/18. ¿Pueden estar todas las encuestas que se publican equivocadas?. Pueden. Son recientes los estrepitosos fracasos de algunos sondeos electorales. Con independencia de esto, no podemos restar valor a los resultados de estos estudios, sobre todo cuando en los acumulados observamos que hay resultados que empecinadamente parecen repetirse.
Las encuestas sobre la opción de voto de los valencianos y valencianas publicadas por diferentes y prestigiosos medios durante el último año (entre ellas las de SyM Consulting para Valencia Plaza) marcan claramente algunas tendencias. Por una parte un aumento de la confianza hacía el PSPV y por ende hacia su líder en la Comunitat Valenciana, Ximo Puig, y frente a esto la caída del voto del Partido Popular.
Tras este titular destaca la consistencia del voto en Compromís, lo imprevisible del de Ciudadanos y la caída de Podemos.
Estudios electorales publicados para la Comunitat Valenciana durante este año 2018:
¿Tras 27 años el PSPV-PSOE volverá a ser la primera fuerza política en la Comunitat? Eso dicen en este momento las encuestas. Si obtenemos una media de los sondeos realizados por Valencia Plaza, Las Provincias y Levante-EMV en este 2018 el PSPV-PSOE se acerca al 27% de voto, el PP se situaría en un 21,5, Compromís en un 19,3, Ciudadanos en un 16,6 y Podemos en un 8,8. Es decir, si las tres fuerzas del Gobierno del Botànic revalidaran el acuerdo lo harían con un respaldo mayor que el obtenido en 2015, un 54,8%.
Algo bien debe haber hecho pues este nuevo gobierno valenciano para que, al menos por ahora, los estudios sociológicos arrojen este nivel de confianza. Pero esto, el que lo hagamos bien, no es garantía de victoria electoral, y lo sabemos bien todos los que estamos en política. Es, sin duda, un requisito imprescindible, pero necesita ser reconocido como tal por los ciudadanos.
Bauman instauró el concepto de “vida líquida” que marca una sociedad de valores inestables y en la que los medios desgastan las noticias a una velocidad desconocida hasta ahora, una sociedad donde asistimos a una insoportable banalización de la política, a la inmediatez y por consiguiente a cambios constantes, a mi me gusta señalar que vivimos una “política líquida”.
Y en este espacio es normal que el PP no acabe de encontrar la rampa de su recuperación. Sin duda, es demasiado pronto para hacerlo, la crónica de la corrupción esta demasiado presente en la retina de todos los ciudadanos y de sus votantes. Tener a Zaplana, Blasco y en breve al icono de la economía conservadora, Rato, en prisión pesa demasiado para que puedan pasar pagina con la rapidez que desearían sus dirigentes. Aunque también creo que llegado el momento de las votaciones mejorarán ligeramente estos indicadores demoscópicos.
Podemos no acaba de recuperarse de su congreso de Vistalegre en febrero del 2017. Han tropezado con sus propias consignas. Se han convertido demasiado pronto en un partido clásico, en lo que ellos mismos denunciaban. Han acabado transformándose en una copia de IU, pero una vez fagotizada, sin IU.
Mientras, la coalición Compromis sigue aguantando en el difícil panorama político actual. A ellos, al igual que a nosotros, les ha sentado bien gobernar.
Alguien podría pensar que con estos resultados y este panorama se deberían adelantar las elecciones autonómicas. Si hay una mayoría de valencianos y valencianas que, según los sondeos, apuestan por mantener las políticas que desarrolla el Gobierno del Botànic, sin duda este sería un buen momento para convocar elecciones. Yo, a veces, también lo creo. Aunque un adelanto electoral no puede o no debe enmascarar una simple táctica partidista.
Los valencianos merecemos una singularizaron de nuestro autogobierno. Merecemos unas elecciones donde hablemos de lo nuestro y, donde nuestros retos y nuestras metas no se vean relegados por el ruido de otros ámbitos electorales. Los grandes juegan la “Champions”, los demás la “UEFA”, a otros les queda la Copa del Rey. En algún momento los valencianos deberemos jugar la liga de los campeones.
No obstante, como se titula esta reflexión, esto va de encuestas, por lo menos hasta las elecciones… cuando sean.
Alfred Boix es portavoz adjunto del PSPV en Les Corts