VALÈNCIA. Lunes 25 de noviembre de 2019. Stadler Rail AG (SRAIL) cierra en la bolsa suiza a 49,76 francos suizos (CHF), es decir, 45,45 euros al cambio. O lo que es lo mismo: su plusmarca histórica desde que se estrenara en el parqué el pasado 12 de abril a 38 CHF, unos 35 euros. De este modo, el fabricante ferroviario se revalorizaba prácticamente un 31% en poco más de siete meses, alcanzando una capitalización de 4.545 millones de euros al cambio.
Sin embargo, desde aquella histórica sesión (25 de noviembre) la cotizada por Peter Spuhler ha retrocedido un 8,7%, lo que equivale a una pérdida de capitalización de 400 millones de euros. Todo ello mientras sigue ganando contratos en diferentes partes del punto y con unos 'explosivos' resultados en la primera parte del año, que arrojaron un espectacular incremento del 263% respecto al mismo periodo del pasado año.
Pero pese a ello, y buena culpa la tiene la recogida de beneficios que de este modo oxigena la subida tal y como se aprecia en el gráfico, SRAIL se mantiene un 19,5% por encima del precio del debut. Su actual valor en bolsa (4.145 millones de euros tomando el cierre de ayer)- la llevaría a situarse dentro del Ibex 35 entre CIE Automotive (2.719 millones) y Acciona (5.044 millones).
La empresa fundada por Ernst Stadler en 1942 informó en la presentación de sus cuentas semestrales que aproximadamente un tercio de los ingresos netos se generan en la primera parte del año y los otros dos entre junio y diciembre. Todo ello mientras reconoció que está bien posicionada en un entorno de mercado creciente pero económicamente difícil. Para ello citó factores como el tipo de cambio, la desaceleración económica, la turbulencia geopolítica y el retraso en la puesta en marcha de la flota en East Anglia.
Una Stadler que hace un par de meses ganó su primer pedido en la región del Pacífico tras obtener un pedido de 34 locomotoras, que se fabricarán en su planta valenciana de Albuixech, para Taiwán. Estamos orgullosos de poder suministrar por primera vez un importante pedido de material rodante a Asia. Las locomotoras se utilizarán en una topografía montañosa exigente, similar a la de Suiza, y en condiciones climáticas extremas. Stadler tiene gran experiencia en la adaptación de vehículos ferroviarios a desafíos tan específicos. Esto junto con nuestra capacidad de producir locomotoras ligeras y respetuosas con el medio ambiente han sido las razones de nuestro éxito en Taiwán", explicaba entonces Thomas Ahlburg, consejero delegado del grupo Stadler.
El fabricante ferroviario amplió hace mes y medio sus fuentes de financiación -más allá de la banca y la bolsa- al mercado de bonos, con una emisión a siete años por valor de 300 millones de francos suizos (cerca de 272 millones de euros), que tuvo una gran acogida entre los inversores. El dinero captado va destinado a financiar las inversiones a largo plazo en las instalaciones de SRAIL con el fin de crecer.
"Tras nuestra exitosa salida a bolsa a principios de este año, la exitosa emisión de bonos de debut de Stadler amplía aún más nuestra presencia en los mercados de capitales y nos permite beneficiarnos de las condiciones favorables actuales del mercado para financiar inversiones con el fin de apoyar nuestro crecimiento", reconocía Raphael Widmenr, director de Finanzas del grupo.