VALÈNCIA. La Comunitat Valenciana se ha convertido en un vivero de proyectos de altura. PLD Space, Zeleros y ahora Stratolloon, un innovador sistema de aterrizaje para globos estratosféricos, esos que utilizan en Google para emitir internet en zonas rurales o las agencias mateorológicas para poder hacer las predicciones del tiempo.
Ideado por Jorge Sancho, graduado en Ingeniería Aeroespacial de la Universitat Politècnica de València, recuerda cuando empezó con el proyecto, allá por 2017. "Vi un video de YouTube que iba sobre globos de este tipo y salía cómo se estrellaba. Era justo la noticia de un globo de Google que había caído en una la mansión a las afueras de Los ángeles y como siempre me había gustado el tema de los drones pensé que se podía hacer algo en ese sentido".
El problema de este tipo de globos es que en la actualidad no acaba de controlarse dónde caen. Suben en una caja equipada con paracaídas, al llegar a cierta altitud el globo explota y si el paracaídas funciona bien, no hay problema. Sin embargo, hoy por hoy en el 70% de los casos no es así, de modo que el globo -y los equipos que transporta- acaban estrellándose contra el suelo e inhabilitándolos para otros experimentos.
En este sentido, Sancho ha diseñado junto a sus socios un sistema que garantiza el aterrizaje controlado de las cargas útiles desde el suelo a la estratosfera y viceversa. Su intención es, por un lado, que puedan quedarse fijos en el aire para poder obtener durante un largo periodo de tiempo los datos de un mismo lugar y por otro que el aterrizaje sea en un radio controlado definido previamente.
La clave es la sustitución del paracaídas por cuatro pequeños motores, hélices y un sistema de piloto automático que permite al usuario guiar al globo para que aterrice en el punto exacto deseado. De este modo, cae al suelo de forma totalmente controlada y segura, lo que garantiza la integridad de los equipos embarcados y la posibilidad de reutilizarlos. Además, incorpora una aplicación de monitorización que permanece activa durante todo el vuelo y aporta datos de la misión en tiempo real.
Con este proyecto, Sancho fue ganador del Desafío Comunidad Valenciana del Concurso Europeo de Navegación por Satélite (ESNC) 2017 y fue incluido entre los 10 proyecto más innovadores de toda Europa en la final del concurso. Entre sus premios, estar un año en StartUPV, la incubadora de empresas de la institución. "Decidí utilizar la plataforma de la universidad para buscar un equipo y fue entonces cuando empezamos oficialmente en 2018", recuerda.
La recuperación controlada del sistema y lo que contenga es clave, ya que habitualmente son equipos de alto coste como sensores y que permiten conocer las temperaturas, la velocidad del viento o la humedad, por ejemplo. Al poder ordenar su regreso y el punto de llegada, esto permitirá incorporar mejores equipos y tomar datos más precisos.
Sin embargo, la intención de Stratolloon no es solo su desarrollo, sino que planean lanzar estos globos alrededor de todo el mundo en un plazo de tres años y crear una plataforma donde albergar todos estos datos. "La idea es que en lugar de que sea el científico quien tenga que lanzar el globo o el cohete o contratar al satélite para obtener información de la estratosfera, entre en nuestra plataforma y en ese momento puedan recibir todos los datos que quieren, en tiempo real, y sin salir de su oficina", señala.
Próximamente empezarán las pruebas de motores para asegurarse de que todo funciona correctamente, además de testear la sensorización y la electrónica. "La idea es poder lanzarlo este año de una manera muy básica, ponerle una cámara y ver que todo cuadra", señala.
Con esta creación su intención es abrir tres líneas de negocio. La principal será que el cliente pueda acceder a los datos a través de su plataforma con una suscripción mensual, sin tener que molestarse en contratar un satélite o un globo. Por otro lado, también estarán a disposición de compañías que quieran hacer publicidad en altitud, ya que se trata de un servicio de subida de carga. "Podrás subir un peluche y hacer tu anuncio con la tierra de fondo", explica.
Por último, pondrán su sistema al servicio de otras compañías que quieran utilizarlo y lanzarlo ellos mismos. "Podemos abaratar costes respecto a la competencia gracias a que el sistema luego lo recuperamos, con lo cual los reutilizamos", recuerda. "La idea futura es tener bases en cada país o zona y tener una red de distribuidores, colaboradores o incluso empleados que se encarguen de cada área", señala.
Ya han tenido conversaciones con algunos de sus posibles clientes, como las agencias meteorológicas. "Nos comentaban que su problema era que, como los globos se perdían, no podían meter una cámara de 10.000 euros para captar la información por lo que los datos eran limitados. Nosotros podremos ofrecerlos al poder meter mejores equipos en las cajas", recalca. Su idea es que el servicio de elevar carga pueda costar la mitad de lo que actualmente pide la competencia. "La idea es que sea bastante asequible".