VALÈNCIA. Hay quien dice que aquello de lo que no se habla no existe. Qué equivocados están. Hay silencios capaces de llenar toda una habitación y, también, de dejarla sin aire; cosas que nunca se dijeron y que, sin embargo, son clave para completar el retrato de una persona. Y es que uno es tanto aquello que muestra al resto como los deseos o pensamientos que, por pudor o miedo, nunca llega a verbalizar. Es este baile de silencios y contradicciones el tablero en el que juega la directora alemana Annika Pinske, que plantea en Talking About the Weather (Alle reden übers Wetter, 2022) un relato en el que tratará de deconstruir a su personaje principal, Clara (Anne Schäfer) a través de aquellas relaciones aparentemente sólidas pero que penden de un hilo. 

La cinta forma parte del ‘menú’ de la Sección Oficial del festival Cinema Jove, que celebra su 37ª edición del 24 de junio al 2 de julio, un largometraje que se sumerge en las distintas caras de la protagonista, variaciones de una misma personalidad que dibujan un complejo mapa emocional que tiene que ver tanto con uno mismo como con su relación con los otros. Clara trabaja para conseguir su doctorado en Filosofía, un camino que no será fácil en una Berlín que la mantiene separada de su familia y absorta en un despiadado mundo académico del que trata de escapar con una aventura sexual con un alumno. A punto de cumplir 40 años y divorciada, Clara busca reconectar con su hija adolescente -que vive con su padre- y con su madre, a la que visitan en un pequeño pueblo de la Alemania Oriental donde se crió.

Su viaje la enfrenta a un mundo que, aunque le es familiar, no lo tiene como propio. Tampoco el frío Berlín se ha llegado a convertir en su casa, dos espacios en los que se siente tan propia como extraña. Este tira y afloja, esta incomodidad casi física, marca a una Clara que se siente ciudadana de dos mundos y, al tiempo, de ninguno. En ese regreso al pueblo que la vio nacer tratará de recomponer los lazos con su madre, una construcción que se puede antojar un tanto impulsiva y que más que construir puentes pondrá un foco en los vacíos existentes.

Es clave una escena en la que Clara acompaña a su madre al supermercado, un paseo en el que, casi sin venir a cuento, le espeta: ¿Cuáles son tus planes de aquí a diez años? Sorprendida, su madre no sabe qué contestar y, casi para pasar el trámite, le confiesa que le gustaría encontrar trabajo antes de jubilarse. Clara no da por buena una respuesta que se le antoja superficial y que, quizá por las propias inseguridades de su madre, la ha puesto contra un espejo en el que no estaba preparada para mirarse. Poco después, y tras una discusión cotidiana, la hija adolescente de Clara le pregunta a su madre cómo está. ¿La respuesta? El silencio.

En Talking About the Weather la directora plantea un interesante juego en el que viaja a la profundidad de las relaciones familiares y sentimentales sin apenas cruzar la superficialidad de las mismas, una superficialidad impuesta por los propios personajes que se han negado sistemáticamente a hablarse cara a cara, con honestidad. La cinta parece no llegar a cruzar nunca la línea de la intimidad de los personajes, que en momentos puntuales rebasa sin pudor, un relato construido de manera casi matemática que hurga en aquello que se barre bajo la alfombra.