VALÈNCIA. Telefónica ya ha cerrado 90 centrales de cobre en la Comunitat Valenciana, lo que supone seguir avanzando en su plan de digitalización y transformación de la red para ofrecer la mejor conectividad. De este modo, se han clausurado 45 centrales en Valencia, 12 en Alicante y 33 en Castellón, según ha informado la compañía en un comunicado.
El director de Operaciones de Telefónica España, Pablo Lesdesma, ha explicado que Telefónica comenzó su proceso de trasformación de la red con el cierre de centrales en el año 2016 y, desde entonces, "a pesar de circunstancias adversas en algunos años como el pasado, ha seguido su plan de cierre de centrales de cobre y expansión de la fibra para avanzar en el objetivo de ofrecer la mejor conectividad, tanto a clientes particulares como empresariales".
"Una vez más Telefónica, que con su despliegue de fibra ha contribuido en gran medida a situar a España como el país europeo con más fibra óptica, desarrolla su actividad acorde a las necesidades que traen los nuevos servicios y la nueva generación de telefonía móvil 5G", ha apuntado.
El objetivo de este plan de trasformación es completar la cobertura de fibra con una red "totalmente digital e impulsar que todos los clientes pasen a fibra para así mejorar su experiencia con los servicios y colocarlos en la mejor posición ante el futuro digital, además de consolidar el objetivo medioambiental de Telefónica".
Desde el inicio de su plan de cierre, Telefónica ha cerrado ya 1.000 centrales de cobre en España; ha desmontado 65.000 toneladas de cable, ha reciclado 7.140 toneladas de RAEE (residuo de aparatos eléctricos y electrónicos) y otros elementos, ha reutilizado más de 128.000 tarjetas en su red, y ha ahorrado alrededor de 1.000 Gwh (355.000 tCo2, equivalente a plantar seis millones de árboles).
En cuanto a la ocupación del espacio, una central de fibra da servicio al mismo número de accesos que se atiende desde cuatro centrales de cobre, y la tecnología de acceso fibra ocupa solo el 15% del espacio del acceso de cobre.