HBO estrena la adaptación de la minisierie Criminal Justice de la BBC en la que James Gandolfini iba a interpretar el papel de abogado defensor. John Turturro le sustituye en esta obra oscura y trágica que nos devuelve a la mejor HBO
VALENCIA. James Gandolfini, protagonista de Los Soprano, falleció en 2013 dejando varios proyectos inacabados. Uno de ellos iba a significar su retorno a la televisión. Estaba previsto que volviera al canal que le había dado su trabajo más brillante, la HBO, con una adaptación de la miniserie de la BBC del año 2008 titulada Criminal Justice. La cadena ya había rodado incluso el piloto, con Gandolfini en el papel de abogado defensor. Pero la tragedia interrumpió la producción, y el proyecto se aparcó en un cajón.
Tiempo después la HBO decidió recuperarla como homenaje al actor. El hombre que encarnó a Tony Soprano había puesto mucho empeño en adaptar la serie británica, que consideraba magnífica. Tras su pérdida se le ofreció entonces el papel a Robert DeNiro, que se mostró dispuesto, hasta que en el último momento declinó la oferta por problemas de agenda. Finalmente John Turturro aceptó el papel y la serie se volvió a rodar desde cero.
El próximo diez de julio la HBO estrena finalmente la miniserie de ocho episodios (la británica son cinco), en la que Galdonfini aparece como coproductor ejecutivo in memoriam. Esta semana, como primicia, la cadena ha puesto a disposición de sus clientes online el primero de ellos. Un piloto que nos ha dejado boquiabiertos y entusiasmados.
Un crimen, un joven desorientado y unas instituciones que hacen aguas
The night of narra el intento desesperado del joven neoyorkino de origen pakistaní Nazir Khan por demostrar que es inocente de un crimen, pese a que tiene todas las papeletas para ser declarado culpable, ante un sistema judicial y unas instituciones penitenciarias que hacen aguas por todas partes.
Una noche Nazir le coge prestado el taxi a su padre para acudir por primera vez a una fiesta del equipo de baloncesto de su universidad. En el trayecto una desconocida sube al vehículo, y él, inexperto y deseoso de vivir experiencias con chicas jóvenes de su edad, se deja llevar por su atractivo y termina en su casa. A la mañana siguiente Nazir se despierta junto al cadáver de la chica apuñalada sin recordar qué ha pasado. Finalmente es detenido con el arma homicida en su bolsillo.
Un abogado de oficio, Jack Stone (John Turturro), entra en escena al final del episodio a la caza de cualquier caso que aparezca por las comisarías, convirtiéndose de forma casual en la única persona del sistema dispuesta a ayudarle.
HBO ha vuelto
Aunque somos conscientes de que es pronto todavía, después de ver el estreno nos aventuramos a apostar por ella como una de las series más atractivas del verano. Desde luego, una vez visto su arranque, no pensamos perdernos su resolución, aunque como espectadores de la original británica conozcamos el argumento. Tampoco está claro si lo van a seguir al pie de la letra o, por otro lado, como en House of Cards, llegará un momento que cada versión vaya por su lado. Según diversas publicaciones se trata de una adaptación libre, por lo que las diferencias entre ambas series pueden aumentar.
Por ahora el primer episodio que hemos podido visionar demuestra haber superado a la británica con una producción y dirección exquisita, además de ofrecer un dibujo del personaje protagonista menos acelerado y más rico en detalles culturales, e interpretativos, con un magnífico Riz Ahmed en el papel de Nasir Khan.
Pero si hay una razón por encima de las anteriores para ver esta breve obra antológica, puesto que es una temporada cerrada, es sobre todo porque la serie respira HBO, huele a HBO. Esa HBO que creíamos perdida entre tanto proyecto fallido y estrellas del rock&roll. Es la HBO de Oz, The Wire, y Los Soprano. Aunque sea solo un fugaz destello, este verano HBO ha vuelto.
Muy fiel al primer capítulo de la original británica en cuanto a los detalles de la trama, se distancia de ella gracias al escenario, la ciudad de Nueva York, que sustituye a las calles de Londres que aparecían en la versión de la BBC. La ciudad es importante, el escenario lo es, porque marca las tensiones que se respiran en las calles, que en el caso norteamericano son mucho más fuertes.
En segundo lugar, la brecha entre ambas versiones se acentúa por el perfil de su protagonista, un joven igual de cándido y buen chico que el original, aunque en este caso se trate de un neoyorkino de origen pakistaní. Un ingrediente que añade a la nueva versión connotaciones de origen racial en una ciudad tan atractiva y a la vez peligrosa como Nueva York, cuya cárcel de Rikers Island, la segunda prisión más grande de los Estados Unidos, ocupa el décimo puesto en la clasificación de peores cárceles del país.
Al conocer como conocemos la trama original, cuyo tráiler les mostramos a continuación, nos encaja la decisión creativa de los guionistas y estamos seguros de que esta cuestión se convertirá en una bomba de relojería en los siguientes episodios, cuando el personaje entre en el sistema penitenciario durante su espera del juicio. “Mira, Mustafá dejó sus bombas en casa”, le espeta un afroamericano a Nasir simplemente al cruzarse con él por una calle.
La adaptación está escrita por el novelista Richard Price junto a Steven Zaillian, que también firma en la dirección. Richard Price es un afamado novelista, autor de títulos como The Wanderers, Clockers y La vida fácil, historias de crímenes en los bajos fondos que habitualmente se desarrollan en la ciudad de Nueva York. A Price se le reconoce también por su carrera en el cine, con colaboraciones en los textos de películas como El color del dinero, o series como The Wire. Es por eso que se nos hace tan cercano ese tono al estilo The Wire, su tempo, el ambiente interracial, las negligencias y la desesperante burocracia del cuerpo de policía y las instituciones, los silencios, las miradas… Tiene cierto tufo a The Wire, y tendrá, sin duda, como tiene Criminal Justice, algo de Oz, en una de las apuestas más transgresoras de la BBC.
Veremos algunas caras conocidas de HBO como la de J. D. Williams, el joven traficante que interpretó el personaje de Bodie en The Wire; o Michael K. Williams, más conocido como Omar Little; o Lord Jamar, cuya cara recordaremos por Oz. Actores conocidos de otras series míticas del canal de cable. Porque estamos de nuevo en casa.
No pasan ni diez minutos y es lo primero que se escucha. En Alemania los procesos legales se hacen mejor que en el resto de Europa. O si un pederasta quiere pasar desapercibido tendría que irse a Portugal en lugar de Alemania o Inglaterra. Todo para armar un documental de tres partes que más que contestar a la pregunta de quién mató a Madeleine McCann traza el perfil de uno de los sospechosos, un posible psicópata