MADRID (EP). El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha explicado que sus trabajadores y los provenientes del antiguo Banco Mare Nostrum (BMN) que se acogieron al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) puesto en marcha el pasado año, unos 2.000, abandonarán la entidad antes de final de año. "La idea es que a finales del primer semestre prácticamente dos terceras partes de esas 2.000 personas hayan abandonado el grupo y antes de final de año se haya completado el proceso de salidas de personal", ha apuntado Sevilla durante su intervención en el 25º Encuentro del Sector Financiero organizado por Deloitte, ABC y la Sociedad de Tasación.
El 'número dos' de la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri ha explicado que las antiguas oficinas de la red de BMN ya trabajan con el nombre y la imagen comercial de Bankia, lo que implica también una inversión para la modernización de los cajeros automáticos, y el centenar de las que quedaban por cerrar como consecuencia de las redundancias de ambas redes ya han sido clausuradas.
Sevilla ha puesto en valor que el proceso de integración de ambas entidades se cerró el pasado 19 de marzo en un "tiempo récord", lo cual es importante para "evitar incertidumbres y tener una aproximación al cliente lo antes posible". En todo caso, el proceso de integración ha supuesto un "esfuerzo importante" de todos los empleados, tanto en términos de formación como de apoyo al proceso, pues unos 800 trabajadores de Bankia han dado soporte a las oficinas de BMN.
En cuanto a la digitalización, el consejero delegado de Bankia ha explicado que el "centro más inmediato" de la entidad para los próximos dos años será los medios de pago, un segmento en el que el banco ya está alcanzando alianzas, como una reciente con PayPal.
Por otra parte, el consejero delegado de Bankia ha explicado que desde los bancos no están en contra de los tipos de interés bajos, sino de los negativos, porque tienen como consecuencia una merma de la rentabilidad. "No estamos en contra de los tipos de interés bajos. Nos gustan los tipos de interés bajos, pero no los negativos, porque nos cambia la ecuación de la rentabilidad", ha apuntado el ejecutivo durante el encuentro.