Las dos formaciones mantienen que por el momento el acuerdo es puramente presupuestario, sin intenciones de coalición
VALÈNCIA. El Partido Socialista y Ciudadanos han llegado a un acuerdo en Moncada para aprobar los primeros presupuestos que verán la luz en tres años. Desde 2017 el Ayuntamiento había estado funcionando a base de prórrogas, ya que las formaciones políticas del municipio fueron incapaces de alcanzar un consenso que asegurase la elaboración de unas nuevas cuentas. Una tónica que finalmente se rompió este lunes, cuando los socialistas aceptaron oficialmente las condiciones de Ciudadanos a cambio de sus votos favorables para la aprobación del presupuesto.
Cabe recordar que el PSPV de Amparo Orts gobierna en solitario con una mayoría simple de nueve concejales. Esto confiere cierta debilidad a su liderazgo y la obliga a buscar el apoyo de otros partidos cada vez que quiere sacar adelante sus iniciativas plenarias, las cuales requieren de un mínimo de 12 votos para prosperar. Una situación que, inevitablemente, recuerda a la de su compañero también socialista Jesús Ros en Torrent.
Ros, que gobernaba Torrent con mayoría simple, anunció el pasado mes de abril un pacto presupuestario con Ciudadanos después de varios años de prórrogas. Y, ya de paso, también la entrada de los naranjas en el ejecutivo local con dos concejalías. La noticia no sentó demasiado bien a sus socios de gobierno en la Generalitat, Compromís, puesto que hasta ese momento se había estado dando prioridad a las coaliciones de izquierdas en la Comunitat. Aun así, Jesús Ros hizo oídos sordos y marcó un precedente que, quién sabe, podría extenderse a otros municipios.
Por el momento, sin embargo, Moncada se mantiene mucho más prudente que Torrent y se queda tan solo en la primera fase de la unión: "Agradecemos a Ciudadanos que haya dejado de lado la ideología, pero este es un acuerdo presupuestario por la situación excepcional de la Covid-19", expresaba la alcaldesa socialista Amparo Orts. "Es un acuerdo única y exclusivamente para los presupuestos de 2020", apuntillaba por su parte el portavoz de Ciudadanos, Jesús Gimeno.
Sin embargo, Gimeno también resaltaba el buen entendimiento que ha habido entre las dos formaciones durante todo el proceso de negociación, así como la voluntad de cooperación que han mostrado ambas partes. Y eso que no ha sido un proceso corto ya que, según el portavoz naranja, las conversaciones para aprobar los nuevos presupuestos comenzaron a principios de la pandemia.
El eje central del acuerdo entre el PSPV y Ciudadanos es el Plan Global Estratégico frente a la Covid-19, un paquete de medidas sociales, económicas y tributarias que pretenden incentivar la recuperación del municipio y subsanar los efectos negativos de la crisis sanitaria sobre los ciudadanos.
Con 1,3 millones de euros de inversión, este proyecto prevé la implantación de medidas sanitarias urgentes como la desinfección de espacios públicos o la compra de equipos de protección. Más a largo plazo, también se ha aprobado un plan de empleo local por un valor de 100.000 euros y otro de apoyo a las pymes y los autónomos por exactamente la misma cantidad. En este sentido, ha sido suspendida la tasa de ocupación de la vía pública para dar un respiro a hosteleros y comerciantes.
A nivel impositivo, Moncada facilitará el pago y las devoluciones de tasas por servicios que no se han podido prestar. Además, ampliará plazos para el abono de impuestos municipales, requerimientos de embargo o liquidaciones. En el plano asistencial, se dedicarán 180.000 euros a las ayudas de emergencia para personas vulnerables, y además se ampliarán las plazas de Servicios Sociales en un mínimo de cinco puestos. Finalmente, y para garantizar la transparencia, será constituida una mesa de diálogo para que el resto de las formaciones políticas y agrupaciones sociales de Moncada puedan aportar su visión constructiva.
Aun así, la mayor medalla que se cuelga Ciudadanos con estos presupuestos es haber conseguido que se amorticen 21 plazas de empleo público que en este momento no estaban ocupadas y que según los técnicos del Ayuntamiento no eran necesarias. "Eso nos ahorrará 688.000 euros y podremos utilizar ese dinero para subir el salario al resto de la plantilla de funcionarios", explicaba satisfecho Jesús Gimeno.
Desde Compromís lamentaron que el PSPV no hubiera hecho amago "en ningún momento" de negociar con ellos los presupuestos, a pesar de que a principios de legislatura mantuvieron conversaciones fluidas. Además, recalcaron que las cuentas que se han aprobado con Ciudadanos no corresponden a las verdaderas necesidades de Moncada. "Empezaron a negociarse en enero, y la situación ha cambiado mucho desde entonces", declaró Pep Esplà, su portavoz. "Creemos que faltan más ayudas al comercio local, a los autónomos y a los jóvenes", concluyó.
Por su parte, el Partido Popular lamentó la falta en inversiones. Y es que, de los 14,5 millones a los que asciende el total del presupuesto, tan solo 13.000 euros se dedican a ese apartado: "Estamos de acuerdo con las ayudas a la Covid-19, pero el futuro de la ciudad está en las inversiones, y no suponen ni un 1% del total", sostuvo el portavoz Pau March. Además, los populares defendieron que muchas de las medidas destinadas a paliar el impacto de la Covid-19 son realmente recicladas de los anteriores presupuestos, sin especificidades que se adapten a la nueva situación: “No responden a las necesidades concretas que demandan los empresarios", apostilló.
Finalmente, VOX se quejó de que presentaron hasta tres hojas de enmiendas que fueron automáticamente rechazadas. Entre ellas, según explicó su portavoz Elena Carrasco, se encontraban la modernización del alumbrado en ciertas zonas de la ciudad o el aumento de profesionales de la limpieza en la vía pública. Además, VOX coincidió con el PP en que muchas de las medidas contra la Covid-19 se adoptaron de los anteriores presupuestos sin mayores variaciones.