Trabajo adelantado: Puig ya se reunió dos veces en 2017 con el nuevo ministro de Economía

VALÈNCIA. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, nombró este jueves al vicepresidente del Banco Europeo de Inversiones (BEI), Román Escolano, como nuevo ministro de Economía, Industria y Competitividad en sustitución de Luis de Guindos, que asumirá la Vicepresidencia del BCE el próximo 1 de junio.

Escolano se incorporará este viernes a la reunión del Consejo de Ministros, después de que hoy por la mañana Rajoy comunique al Rey Felipe VI su nombramiento como nuevo titular de la citada cartera.

La designación hecha pública ayer no desagradó en el Palau de la Generalitat. El motivo, el jefe del Consell, Ximo Puig, ya conoce a Escolano y, de hecho, mantuvo dos reuniones en el segundo semestre de 2017 cuando el ahora ministro ostentaba el cargo en el BEI.

Así, el presidente de la Generalitat y Escolano se vieron las caras en la sede de la institución en Luxemburgo a mediados de junio del pasado año cuando el dirigente valenciano acudió al BEI con el objetivo de solicitar más financiación para proyectos en la Comunitat Valenciana. Una reunión en la que Puig también marcó el reto de "recuperar la confianza" de este organismo europeo en las instituciones valencianas.

El segundo encuentro tuvo lugar dos meses después, el 13 de septiembre de 2017. En esta ocasión, Escolano devolvió la cortesía a Puig, quien le recibió en el Palau de la Generalitat. Una audiencia en la que también participó el conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler. Ese mismo día, el ahora ministro asistió a un desayuno de trabajo invitado por el presidente del Consejo de Cámaras de Comercio de la CV, José Vicente Morata.

Dos reuniones que, aunque no tienen por qué indicar un trato especial para el presidente de la Generalitat, sí pueden allanar en cierta medida las relaciones con el Gobierno central. 

Por poner un ejemplo, Puig no llegó a mantener desde que tomó el timón en el Palau ningún encuentro con el ministro saliente, Luis de Guindos, con quien la relación en general ha sido bastante nula más allá de algún rifirrafes verbales a cuenta de la multa aplicada por la Unión Europea al Gobierno valenciano por la gestión del Consell anterior en manos del PP.