VALÈNCIA. (EP) La sección sindical de UGT en el Ayuntamiento de València ha presentado ante Inspección de Trabajo una reclamación por las condiciones laborales en las que trabaja la plantilla del servicio de Bienestar Social, que con la asunción de distintas competencias ha provocado "un aumento de trabajo en una plantilla ya sobrecargada".
El sindicato ha apuntado en un comunicado que esto ha sido causado por la asunción por parte del Ayuntamiento de las competencias en materia de Dependencia y de Renta Valenciana de Inserción, el incremento de personas que pierden su hogar o no pueden llegar a alcanzarlo debido a la crisis y el aumento de migrantes acogidos en València.
En este contexto, ha señalado que la plantilla de Bienestar Social se ha incrementado para asumir estas nuevas competencias y han denunciado que este incremento es "totalmente insuficiente y está produciendo retrasos de hasta tres meses en las listas de espera".
Asimismo, UGT ha resaltado que "las ayudas de emergencia se están abonando después de dos meses desde el momento de su solicitud, por lo tanto más de cinco meses desde que la ciudadanía solicita la ayuda de la administración, perdiendo el objetivo para lo que se crea una ayuda de emergencia".
"Esta situación también provoca problemas de carácter psicosocial entre la plantilla al ver que su trabajo no puede efectuarse con la inmediatez que requiere, ocasionando que la ciudadanía, con toda la razón del mundo, se altere y cargue todo su enfado con el personal que viene desempeñando su trabajo en los centros en los que se les atiende, siendo un problema que no es fruto de la falta de profesionalidad y esfuerzo de la plantilla, sino por razones ajenas al personal aunque en este caso sean ellos/as quienes padecen las consecuencias", ha asegurado el sindicato.
Por otro lado, se ha referido a las incorporaciones de personal contratado "por un periodo de un año, en la mayoría de casos, para hacer frente al trabajo existente". "En la actualidad hay un número considerable de contratos de este tipo, alrededor de un 10 por ciento de la plantilla, con lo que está dando la oportunidad de trabajar durante un año, se le está privando de que pueda conseguir un puesto de trabajo de calidad, lo que repercutiría positivamente en el Servicio", ha criticado.