VALÈNCIA (EFE) Un servicio pionero impulsado por el Tribunal Eclesiástico de València ha activado este lunes una iniciativa de acompañamiento telefónico para familias con problemas de convivencia, a las que ofrece pautas y consejos para prevenir los conflictos que puedan agudizarse por el confinamiento.
Se trata del Servicio Acompañamiento y Mediación Intrajudicial Canónica (SAMIC), que ha movilizado a psicólogos y psiquiatras, antropólogos y sacerdotes "altamente especializados" que se ponen a disposición de las familias de forma "proactiva", con llamadas telefónicas para ofrecer acompañamiento psicológico y espiritual.
Así lo ha explicado a EFE el vicario judicial y director del SAMIC, Jorge García Montagud, que ha detallado que a partir de las nueve de la mañana de este lunes han empezado a llamar a las familias incluidas en sus bases de datos que han sido atendidas por el Tribunal Eclesiástico y el SAMIC en los últimos años.
"Es una forma proactiva de actuar. Somos nosotros los que hacemos esa llamada de la esperanza para ver cómo están las familias más vulnerables durante el confinamiento, que ven agravada su situación, y se le deriva al especialista adecuado para que le dé pautas de comportamiento y consejos para evitar los conflictos", ha explicado.
El servicio hace además "un seguimiento" por lo que "no es solo una llamada, sino que hay un acompañamiento y se le llama para ver si los consejos y las pautas que les han recomendado han funcionado".
Según García, esta iniciativa cobra especial importancia en las zonas rurales y pueblos pequeños con más dificultad a acceder a servicios, y donde las familias a las que han asistido en el Tribunal o el SAMIC "seguro que es la única llamada que reciben preocupándose de cómo están".
El vicario judicial ha incidido de que se trata de un servicio realizado por voluntarios y de forma totalmente gratuita "y que en nada interfiere en el proceso judicial que puedan tener en marcha".
García ha recordado que el SAMIC, que es una iniciativa del Arzobispado de Valencia, lleva tres años en funcionamiento con la finalidad de dar apoyo y refuerzo a las personas que acuden al Tribunal "con procesos matrimoniales problemáticos, con hijos con conflictos y familiares vulnerables".
Muchas de esas familias que tienen identificadas necesitan que el servicio, a pesar del cierre por el estado de alarma, siga activo vía telefónica "para prevenir mayores conflictos familiares y que puedan realizar un manejo adecuado del malestar que produce el confinamiento y sus consecuencias y tratar de mitigar el impacto sobre hijos y otros familiares".
La respuesta que están recibiendo tras realizar las llamadas, ha apuntado García, es de "agradecimiento y esperanza", lo que ha asegurado que les "alienta".
Además de las llamadas que realizan los expertos, la actividad también pone el servicio, a través del teléfono 619.420.973, a disposición de todas las personas y familias que hayan sido atendidas por el Tribunal Eclesiástico, bien con asesoramiento o bien en procesos matrimoniales canónicos.
El SAMIC, tras el fracaso matrimonial, ayuda desde el acompañamiento y la mediación para atender momentos de crisis o situaciones dolorosas en las diferentes fases de la nulidad matrimonial para que sea "pacífica" y fomentar la cohesión familiar.