VALÈNCIA. Como era de esperar, el megacontrato de saneamiento del Ayuntamiento de Valéncia ha suscitado mucho interés entre las principales compañías del sector. Un total de 19 empresas se han presentado, en diferentes UTE, al suculento concurso público convocado por el consistorio por valor de más de 293 millones de euros, IVA incluído.
En concreto, la mesa de contratación ha recibido siete ofertas, que aglutinan a la habituales firmas de este tipo de servicios. Por ejemplo, han concurrido a la licitación en UTE la castellonense Facsa -Grupo Gimeno-, con la valenciana Torrescamara y Rover; también la UTE formada por FCC y CHM, y la formada por Hidraqua, Pavasal y Sociedad de Agricultores de la Vega (SAV).
Además, se han presentado la UTE de Acciona junto con las castellonenses Becsa y Ciclagua; Global Omnium acompañada del Grupo Bertolín; Sacyr con Ocide Construcción y Licuas, y la UTE conformada por Vias (grupo Dragados) y Socamex. La mesa de contratación celebrada el 12 de septiembre registró las siete ofertas, que han sido admitidas a trámite.
De este modo, aspira a retener el megacontrato Acciona, la firma que desde 2006 gestionaba el servicio de saneamiento municipal, cuya adjudicación está investigada en el caso 'Azud'. Tras prorrogarse dos años, el contrato caducó a finales del año pasado, pero para entonces no se llegó a tiempo de lanzar el concurso, por lo que el nuevo gobierno -PP y Vox- aprobó "por motivos de interés general" la continuidad de la prestación del servicio desde el 1 de enero "y hasta la formalización del nuevo contrato que resulte de la adjudicación que se encuentra en trámite".
Hasta finales de mayo, el ejecutivo local no aprobó los pliegos del concurso, que se publicaron el 11 de junio. Sin embargo, los plazos se han ido demorando más de lo previsto. Primero se había fijado que finalizara el plazo de presentación de ofertas el 9 de agosto, pero "a la vista del ritmo de presentación de preguntas y aclaraciones formuladas por las eventuales licitadoras" se retrasó la fecha límite durante 30 días. Y más tarde, se aprobó un nuevo aplazamiento hasta el 11 de septiembre dado que algunas preguntas se habían contestado de manera extemporánea.
Con todo, desde entonces no se habían notificado ni hecho públicos avances en el proceso hasta este lunes. Ante estas demoras, desde el gobierno municipal asegura que el procedimiento "va mucho más rápido" que en otras recientes adjudicaciones de envergadura como el contrato de limpieza o el de jardines, que "tardaron casi dos años en resolverse", señalaron las mencionadas fuentes.
El nuevo contrato tiene un período de vigencia de 15 años, sin prórrogas posibles. En él, la concejalía del Ciclo Integral del Agua que dirige Carlos Mundina incorpora mejoras tecnológicas que permiten la recogida y transporte de las aguas residuales y pluviales hacia las estaciones depuradoras así como la digitalización del sistema de alcantarillado con la introducción de una "plataforma de gestión integrada".
Esta herramienta permitirá un control en tiempo real y una actualización continua del estado de la red y los trabajos en curso y facilitará la transición de un mantenimiento correctivo a un mantenimiento preventivo. Además, prevé la introducción de sensores en la red para controlar parámetros como caudales, composiciones analíticas de agua y velocidades, así como para que la información recopilada permita un mejor conocimiento del estado de la red y la prevención de posibles comportamientos.
Por otra parte, en el contrato se incluye una partida para ejecutar inversiones por valor de 61,8 millones de euros. Entre las actuaciones, se renovarán 25 kilómetros sobre los 170 kilómetros de los colectores más antiguos. Además, entre las actuaciones previstas destaca la renovación y adecuación de 4,5 kilómetros del Colector Norte y asociados, que constituye el 65% de la inversión total proyectada para ejecutar por la nueva contrata en materia de renovación de la red.