Así lo considera el economista jefe de Robeco, una de las grandes gestoras de inversión del planeta, de cara a las elecciones generales de final de mes
MADRID. El resultado más probable de las elecciones generales del 20 de diciembre sería un gobierno de coalición encabezado por los partidos conservadores, afirma Léon Cornelissen, economista jefe de Robeco.
Cornelissen vaticina que el Partido Popular (PP), formación conservadora en el poder y dirigida por el presidente Mariano Rajoy, será la que obtenga mayor número de escaños en el nuevo Parlamento, pero no el suficiente para mantener la mayoría absoluta de la que disfruta. Esto supone, según sus previsiones, que tendría que compartir el poder con Ciudadanos un partido orientado a la empresa y la economia de mercado, lo que sería beneficioso para los intereses de los inversores.
La principal fuerza en la oposición en la actualidad, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), es probable que siga representando este papel. Cornelissen no prevé que el otro gran partido de la izquierda, Podemos, que se percibe como la versión española de Syriza en Grecia, vaya a disfrutar de una representación más elevada.
“Lo mejor para los intereses de los inversores sería una coalición entre el Partido Popular y Ciudadanos, que daría lugar a un gobierno de carácter centrista, orientado hacia la UE, la empresa y la economia de mercado, y con un claro compromiso contra la corrupción”, afirma. Pero la otra cara de la moneda es que España no tiene tradición de gobiernos de coalición, por lo que existe la posibilidad de que el Partido Popular gobierne en minoría, o incluso que se concierte un ‘gobierno de mayoritarios’ aliándose con los socialistas.”
En las próximas elecciones generales del 20D, se repartirán los 350 escaños del Congreso de los Diputados y 208 de los 266 escaños del Senado. Estos comicios se suceden tras las recientes elecciones autonómicas en Cataluña, la comunidad española más rica, pues representa la quinta parte del PIB, en las que el movimiento independentista se alzó con una mayoría de escaños, aunque no con el apoyo de la mayor parte de la ciudadanía. Los principales partidos políticos españoles se oponen a la independencia de Cataluña, aunque ninguno de ellos ha obtenido grandes resultados en la región.
"Los sondeos se han tornado muy volátiles últimamente, pero parece claro que ningún partido va a obtener la mayoría en España” declara Cornelissen. “El PP posiblemente sea el más representado en el parlamento, con un 24% de los votos; C's está ganando muchos apoyos y podría situarse en un 23%; mientras que el PSOE probablemente obtendría alrededor del 21% y Podemos cerca del 17%".
Por ello, advierte el experto, es lógico pensar que se producirá una coalición, nueva, entre el PP y Ciudadanos, que podría ser positiva. El mejor resultado para los inversores es que se mantenga la tónica actual en España, aunque se atenúe un poco. En general, las políticas económicas no cambiarían demasiado.”
Aunque protagoniza un problema de secesionismo regional similar al de Escocia en el Reino Unido, “Cataluña es también muy importante de cara a la batalla electoral”, aclara Cornelissen. “Se ha producido una escalada, en la que la coalición independentista, con al apoyo de la izquierda radical, ha anunciado una hoja de ruta para alcanzar la independencia. Pero el Tribunal Constitucional español ha suspendido esta iniciativa a resultas de su impugnación por parte del gobierno central.”
“Los catalanes han anunciado que seguirán avanzando y presionando, por lo que existe una crisis en ciernes. La insubordinación de los líderes catalanes, en teoría, podría dar lugar a acusaciones penales por desobediencia al Tribunal Constitucional, por lo que la situación podría empeorar muy rápidamente. Pero el presidente Rajoy ha abogado por la unidad nacional y está adoptando un enfoque moderado y reflexivo”.
Cornelissen afirma también que las luchas internas entre los independentistas, incapaces de llegar a un acuerdo para nombrar a un nuevo presidente para su parlamento regional, podrían obligar a convocar -nuevos comicios en Cataluña el próximo año. “Lo irónico es que agencia de rating Fitch ha rebajado la calificación crediticia de Cataluña a 'BB-' ('bono basura'), debido a la proliferación de las tensiones independentistas, mientras que España mantiene una calificación de investment grade, con 'BBB+'”, manifiesta.
“El Gobierno ha endurecido las condiciones de financiación para Cataluña, pero ha desbloqueado nuevos fondos, con condiciones más estrictas. Están teniendo cuidado de no provocar en exceso al electorado catalán. Mi principal previsión es que el nuevo gobierno central tenga algunos gestos decisivos, por ejemplo en la esfera fiscal, y que así Cataluña decida permanecer en España, ya que no tiene un mandato claro para abandonarla. Pero las tensiones van en aumento.”
Cornelissen destaca que la mejora de la economía española supone un buen augurio para los partidos proclives a la empresa y la economia de mercado, aunque el desempleo y la deuda se mantienen en niveles elevados en todo el país. “De cara a las elecciones, el contexto macroeconómico resulta favorable en estos momentos”, y añade que “España probablemente registre un crecimiento de más del 3% y, teniendo en cuenta el repunte del conjunto de la zona euro, es probable que la tasa de crecimiento de 2016 sea comparable.”
“La UE no está muy satisfecha con las políticas presupuestarias del Gobierno español, ya que observan un debilitamiento del balance estructural, y están presionando a España para que introduzca mejoras en sus presupuestos, pero tendrán que esperar hasta después de las elecciones. Teniendo en cuenta que el crecimiento económico va en aumento, no creo que el nuevo gobierno tenga mucho trabajo que hacer en este frente.”
“El endeudamiento público sigue siendo elevado, con un 99% del PIB, pero no va a empeorar el año próximo, también gracias al citado repunte, por lo que no soy pesimista en ese ámbito. Lo más probable es que se logren contener las tensiones regionales, que se constituya un nuevo gobierno de coalición y, en resumen, la mejor noticia para los mercados seria que los inversores no se tengan que preocupar demasiado por España.