VALÈNCIA. Un empresario del sector inmobiliario prepara una inversión de calado en la ciudad de València. Se trata de un proyecto hotelero previsto en la Avenida del Puerto en los números 238 y 240, que tendrá la calificación de cuatro estrellas y contará con cerca de 120 habitaciones.
El hotel, impulsado desde hace dos años aproximadamente según fuentes conocedoras del proyecto, está planteado desde la mercantil Vita Real Estate, tal como recoge la documentación técnica presentada en el Ayuntamiento de València, que ha sacado a exposición pública el proyecto para que los afectados puedan realizar las alegaciones que consideren.
La nueva edificación llenará un vacío urbano que desde hace años constituye el solar de esta parcela, que tiene salida no sólo en la Avenida del Puerto, sino también en la calle posterior, Islas Canarias. El hotel, de esta manera, tendrá fachada en las dos vías y, a juzgar por las recreaciones recogidas en el proyecto de actividad, abrirá una vía de paso -ahora inexistente- entre la avenida y la calle posterior.
Así pues, las instalaciones se repartirán entre sótano, planta baja y hasta 6 plantas con habitaciones, si bien es cierto que el edificio tendrá un volumen con diferentes alturas. De esta manera, la parte de la gran avenida constará de cinco alturas, la de la calle Islas Canarias, de cuatro, y la parte central, de tres. Todas ellas, además, tendrán su correspondiente ático.
En la planta del sótano se ubicará el garaje, que ofrecerá servicio de aparcamiento con 47 plazas, mientras que en la planta baja se encontrarán los servicios habituales de un edificio hotelero, como la administración y recepción, las instalaciones de restaurante y cafetería y otros cuartos técnicos.
Las habitaciones se encontrarán exclusivamente en las plantas superiores: concretamente se repartirán 115 habitaciones dobles y 4 habitaciones adaptadas. La cuarta planta contendrá no sólo una terraza sino también una piscina exterior sin climatizar. Y más arriba, en las plantas áticos, la quinta y la sexta, se ubicarán dos cuartos de instalaciones y las unidades de climatización.
El nuevo hotel reforzará así la plaza hotelera valenciana y dinamizará el sector en una vía de especial relevancia en la ciudad de València y para la que se prevén cambios en los próximos años. De esta manera, la concejalía de Actividades, Lucía Beamud, da un paso más en la tramitación de la licencia tan esperada para los promotores del proyecto.
En este sentido, Beamud quiso resaltar al respecto que el Ayuntamiento de València está sacando adelante "un gran número de licencias y declaraciones ambientales por toda la ciudad, desatascando el gran tapón que dejó el Partido Popular". Según datos del propio Ayuntamiento ofrecidos a finales del pasado mandato, de los 8.300 expedientes de actividad sin resolver que había en 2015, en cinco años la cifra se había reducido hasta los 3.700.
Sobre ello, la edil de Actividades destacó el empleo de las declaraciones responsables para agilizar la dinamización económica y señaló que actualmente en el servicio municipal constan cerca de 1.200 declaraciones responsables presentadas entre 2019 y 2021 que habilitan para la apertura y puesta en funcionamiento de las actividades correspondientes.
En cuanto a las licencias exigidas para poner en marcha actividades por su incidencia ambiental, en el mismo período se concedieron un total de 27 permisos. A juicio de Beamud, "desde la derecha se ha intentado vender durante muchos años que son los que mejor gestionan la economía y las actividades económicas, pero como ha quedado claro en València, no hay color entre su nefasta gestión en la concesión de licencias y el buen ritmo del gobierno de Joan Ribó".
El empresario, único propietario de la sociedad Vita Real Estate, cuenta con varias sociedades dedicadas al negocio inmobiliario. Dos de ellas con actividad en València. Por un lado, Boro Capital Real Estate con la que promueve un hotel detrás de Nuevo Centro y, por otro, una promoción de viviendas en un edificio histórico en la calle San Vicente, en las proximidades de la Plaza de la Reina, a través de la mercantil Stable Real Estate.