VALÈNCIA. (EP). El secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha reconocido este jueves que la Comunitat Valenciana "tiene la situación más objetiva de infrafinanciación", pero ha señalado que como dirigente sindical debe abogar por un "discurso conjunto" porque "hay muchos territorios agraviados": "Hay que encajar muchas piezas porque esto es un sudoku muy complicado y, para que esto no derive en un conflicto interterritorial, no se puede desligar el debate de la financiación autonómica del debate de la suficiencia fiscal".
Así lo ha manifestado durante un encuentro organizado por la Cadena SER en València, al que han acudido, entre otros, el secretario general del sindicato en la Comunitat, Arturo León; el presidente de la Generalitat, Ximo Puig; el delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Fulgencio; consellers valencianos y los portavoces parlamentarios de los grupos de Les Corts, entre otras autoridades.
El dirigente de CCOO, preguntado por si va a defender que la financiación de la Comunitat se sitúe en la agenda política, ha explicado: "Como secretario general, tengo que intentar situar un discurso conjunto sobre el modelo de financiación".
Ha reconocido que "es justa la reivindicación" de la Comunitat pero ha insistido en que "hay que encajar muchas piezas", ya que es un "sudoku muy complicado". Además, "para que esto no derive en un conflicto interterritorial no se puede desligar el debate de la financiación autonómica del debate de la suficiencia fiscal".
Sordo ha ilustrado esta premisa con un ejemplo: "Como la toalla mida un metro, lo que tapemos por arriba lo destapamos por abajo y viceversa. Hay que ampliar la toalla, y la toalla es la base fiscal de este país". En este sentido, ha destacado que para "abordar en serio la financiaciones autonómica necesitamos al menos 16.000 millones de euros de recaudación dentro de ese inmenso margen fiscal que tiene España".
Ha reiterado que "hay que ligar el debate de la suficiencia, de la recaudación suficiente en el conjunto del estado, apara abordar seriamente criterios medianamente objetivos, compensatorios, razonables y justos que mejoren la financiación autonómica de territorios como la Comunitat.
Este "debate de la corresponsabilidad fiscal" implica "definir bien lo que son las competencias de cada instancia institucional y cómo ligamos esas competencias con los ingresos de recursos de cada administración", ha explicado.
Preguntado de nuevo por si "influirá" en situar la financiación autonómica en "primera línea de la agenda pública", ha respondido: "Sí, dentro de un planteamiento global de España. Nosotros como sindicato nos equivocaríamos si fuéramos construyendo este debate de retazos, hay muchísimos territorios en España agraviados en este terreno. Es un lío, pero hay que abordarlo", ha señalado, antes de puntualizar nuevamente que la Comunitat "seguramente tienen la situación más objetiva de infrafinanciación".
Por otro lado, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha afirmado que el Gobierno de Sánchez va a hacer algún movimiento en materia laboral y "alguna cuestión más" en materia de pensiones que no ha concretado, y ha recordado a la patronal que todavía estamos en periodo hábil de legislatura.
El Gobierno, según el dirigente de CCOO, "no tiene mucha más alternativa" en el compromiso sobre la derogación de la reforma laboral, y es "evidente" que es una necesidad, y ha recordado que desde diciembre están cerrados algunos textos sobre la legislación laboral.
Aunque ha reconocido que el Gobierno debería haber movido pieza antes, ha considerado "no defendible" que las patronales CEOE y CEPYME hayan hecho "todos los esfuerzos" para que no haya cambios y cuando se precipita el final de la legislatura, "escandalizarse" por que esté en tiempo de descuento.
Ha indicado que la CEOE no se levantará de la mesa en las reuniones convocadas por el Gobierno para tratar algunos temas pendientes relacionados con la reforma laboral y las pensiones, pero ha asegurado que la patronal "no tiene ninguna voluntad de acordar nada" hasta después de las elecciones generales.
Para Sordo, esta actitud es "una sobreactuación" ya que todavía estamos en periodo hábil de legislatura, y son correcciones de la reforma laboral "de sentido común" que algunos empresarios comparten y que, si no se hacen, impiden o dificultan que la mejora macroeconómica se traslade a los salarios.
El diálogo social no puede ser "un ejercicio del derecho a veto", según Sordo, que ha abogado por rehacer a partir de la próxima legislatura, pase lo que pase en las elecciones, un pacto de derechos laborales más inclusivo y abordar una reforma del estatuto de los trabajadores y del sistema público de pensiones.
Hay que bajar a lo concreto y preguntar a los partidos políticos, ha dicho, qué van a hacer con los salarios "de miseria" que cobran las camareras de piso, la aplicación de los convenios colectivos en las subcontrataciones, el control efectivo de la jornada para limitar el uso fraudulento de horas extra, el alargamiento de los contratos a tiempo parcial o la recuperación del subsidio para mayores de 52 años.
Se ha mostrado partidario de aplicar medidas fiscales para vincular los ingresos a las cotizaciones de los autónomos y ha cuestionado la rebaja del Impuesto de Sociedades al ser los más beneficiados los grupos empresariales más grandes, y ha lamentado que los Presupuestos del Estado, rechazados finalmente por el parlamento, "se quedaran cortos" en materia fiscal.
Para reducir la contratación temporal en sectores estratégicos, ha apostado por buscar la flexibilidad interna vía pacto, de manera que cuando se produzcan problemas la última opción sea el despido y se aplique el ajuste de las jornadas, como se hizo en Alemania o en el País Vasco en la primera fase de la crisis.
Ante los procesos electorales próximos, CCOO anima a la participación en unos momentos en que ha surgido alguna opción que cuestiona unos fundamentos que "no creíamos se iban a cuestionar", como la igualdad de género, según su secretario general.