En concreto, la organización agraria, que a principios de verano confiaba en que esta vendimia se cubrieran los costes de producción, lamenta que no esté sucediendo y señala a los principales grupos bodegueros como responsables, situando los precios casi un 50% por debajo de los costes de producción.
Atendiendo a la composición varietal del viñedo español donde más del 65% son variedades de baja cotización (airén en blancas, tempranillo en tintas y similares), en el caso de que este nivel cotizaciones se generalizase, se podría estar hablando de que los viticultores de estos viñedos sufran en esta campaña unas pérdidas de renta de unos 1.500 millones de euros.
Los informes sobre costes de producción de las variedades mayoritarias en el viñedo castellano manchego cifran tales costes en un intervalo que va desde los 0,40 euro/kg en el caso de la blanca airén y de la tinta tempranillo y los 0,50 euro/kg. como consecuencia, a lo largo de las tres últimas campañas, del incremento desmesurado de los costes de producción y los bajos rendimientos derivados de la fuerte sequía en el sector.
En este contexto, la organización ha señalado que los precios que se han ido conociendo en la última semana se sitúan entre los 0,23 euro/kg. en los airenes (blancos) y un precio ligeramente inferior en los cencibeles (tintos).
Unión de Uniones ha indicado que estos precios muy similares a los de la pasada campaña en un contexto donde, si bien es cierto que los vinos tintos están padeciendo problemas de demanda, no ocurre lo mismo con los blancos.
Por su parte, los datos del Infovi indican existencias de vino blanco en Castilla La Mancha en torno a 2,3 millones de hl. (30 de junio de 2024), la mitad que en el mismo periodo de la pasada campaña. Si bien la previsión de cosecha en la región es superior, no es menos cierto que los mercados de vino blanco no se han visto lastrados por la baja demanda.
Unión de Uniones considera que esta estrategia de partir siempre a comienzos de cada campaña con precios deliberadamente bajos es fiel reflejo de la posición de dominio de grupos bodegueros interesados en tensar la frágil viabilidad de gran parte del sector productor, en este caso en las regiones de Castilla La Mancha, Extremadura y gran parte de la Comunidad Valenciana.
"Se están aprovechando en gran medida de la difícil situación financiera de muchas explotaciones ignorando la situación real del mercado con precios al alza en especial de vinos blancos", han asegurado desde la organización agraria.