Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. La creación de una empresa mixta de energía es uno de los grandes proyectos de cara a los próximos años en los que trabaja el Ayuntamiento de València. Una iniciativa que está en fase de estudio y que el gobierno municipal de València, conformado por Compromís y PSPV, ha incluido en el Plan de Acción Local como parte del programa para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible en 2030.
Se espera que el Plan, aprobado ya por el ejecutivo local y que ha ido recabando alegaciones de asociaciones y partidos de la oposición, salga adelante con carácter definitivo este jueves en el pleno municipal. Y entre las numerosas líneas de actuación en múltiples ámbitos, hace referencia a la constitución de una "empresa municipal de energía sostenible".
Según explica el mismo documento, esta idea plantea una compañía de capital mixto vinculada al Ayuntamiento de València. Así, contaría con la "participación de un socio privado", pero este tendría un "carácter minoritario". Y esta firma mixta tendría el objetivo de prestar los servicios y realizar las obras e instalaciones energéticas municipales.
Concretamente, se encargaría de tres funciones principales: por un lado, de las instalaciones municipales de generación de energía renovable para autoconsumo; por otro, llevaría a cabo las obras y actuaciones en materia de eficiencia energética; y en tercer lugar, haría el mantenimiento y optimización de los sistemas energéticos dependientes del Ayuntamiento.
El proyecto está pilotado desde la concejalía de Emergencia Climática que encabeza Alejandro Ramón, y el propio alcalde, Joan Ribó, ya anunciaba hace algunos meses en Valencia Plaza que había "una serie de técnicos" desarrollando la idea "en esta dirección", si bien todavía quedan por definir algunas "coordenadas" de lo que sería la compañía.
Ciertamente, no se trata de una idea nueva. La coalición política que lidera el alcalde, Compromís, incluía entre sus propuestas electorales un proyecto similar, si bien en aquel caso el anuncio hablaba de una empresa pública, que en una primera fase se aplicaría sólo a los edificios públicos. Ahora la idea parece haber madurado un poco y ya abre la puerta a operadores privados. Aunque en todo caso, con una participación minoritaria.
Otras ciudades ya cuentan con empresas de este estilo. Barcelona, por ejemplo, cuenta con una firma pública. Pero el carácter mixto de la empresa que plantea el gobierno municipal de València la equipara a otras como Cádiz, cuya comercializadora eléctrica está participada por el Ayuntamiento pero también por Endesa y Unicaja.
Con todo, lo cierto es que, según explicó el propio alcalde, el ejecutivo de València estaría indagando no sólo en el sector energético tradicional, sino el sector cooperativo de la energía para poner en marcha la iniciativa. Según Ribó, en València ya hay "experiencias de este tipo", en formato de cooperativa, que pueden resultar "interesantes" de explorar.
"Me parece imprescindible sobre todo en estos momentos que todo el sistema energético no caiga en las manos privadas, sino que haya cierta participación pública, pensando también en el sector cooperativo", explicaba en este sentido Ribó.
